Declaracion tras el 28M

Los malos resultados de la izquierda tienen explicación.

Ahora hay que acertar en la rectificacióN.

Han sido muchas y muy rápidas las lecturas que se han hecho del resultado de las elecciones del 28 de mayo. Tribuna Socialista quiere dar su punto de vista, pues no en todo coincidimos con lo leído y escuchado.

La valoración cuantitativa, es negativa para la izquierda. Mientras en las municipales de 2019, el PSOE le sacó al PP 1.598.577 votos, el pasado domingo, el PP le ha sacado al PSOE 757.727 votos. Ciudadanos ha tenido una caída del -84%, de lo que se han beneficiado PP y VOX. El proyecto de Sumar ha terminado restando, y Podemos ha corrido casi la misma suerte que Ciudadanos.

La participación media en 2019 fue del 65,2%, frente al 63,91 de este pasado domingo, o lo que es lo mismo, la abstención ha alcanzado en las dos últimas contiendas electorales el 35% del electorado.

Los resultados tienen un denominador común: el ascenso de PP y VOX. Ell PP ha obtenido 1.988.092 votos que se nutren de 1.574.707 que han dejado de recibir las candidaturas de Ciudadanos, más los 368.212 que han dejado de votar al PSOE y que probablemente han migrado al PP.

Sin embargo, esta pauta no se ha producido en todas las comunidades y municipios. Nadie está resaltando que el PP, en su flamante Comunidad de Madrid, donde ha obtenido más diputados, lo ha hecho con -44.623 votos que en 2019 (-2,73%). La clave de este resultado está en la desaparición de Podemos, que, a pesar de recibir 158.831 votos no ha obtenido ningún diputado (Podemos obtuvo en 2019, 263.871 votos). Hay que decir que si Podemos hubiese entrado en la Asamblea de Madrid no hubiesen dado los números para gobernar, aunque sí para que Ayuso no tuviese mayoría absoluta.

En Extremadura, la derrota del PSOE sólo es atribuible al propio PSOE, que ha caído un -15,73% en sus votos (-45.253 votos). Mientras que el PP ha recibido 67.108 votos más que hace cuatro años. Este es uno de los casos en los que es muy evidente el trasvase de votos del PSOE al PP.

En el País valenciano el contexto ha sido diferente. La coalición de Gobierno de PSOE con Compromís y Podemos se podría haber reeditado si no se hubiesen hundido las dos últimas, pues el PSOE ha crecido en 4 diputados y en 47.806 votos: Compromís ha perdido 2 diputados (-94.594 votos) y Podemos ha perdido sus 8 diputados por una caída del 60% de los votos. A lo anterior hay que sumar que PP y VOX se han repartido los 434.630 votos de Ciudadanos.

Si las circunstancias en las diferentes comunidades son variadas, en los municipios más si cabe. Sin embargo, hay casos muy llamativos. Uno de ellos es el de Arroyomolinos (Madrid), donde la alcaldesa del PP está imputada por varios casos de corrupción. Pues bien, en este municipio, el PP ha duplicado sus votos y ha pasado de 5 a 8 concejales. Mientras que, en Móstoles, otro municipio cercano al anterior, donde la alcaldesa presuntamente corrupta es del PSOE; sí se ha impuesto la coherencia: El PSOE ha pasado de 10 a 7 concejales y, consiguientemente, perderá la alcaldía.

La casuística es muy diversa, pero el repaso cuantitativo de estos ejemplos nos permite sacar nuestros puntos de vista cualitativos.

La primera conclusión, no por novedosa, es que el electorado de derechas no castiga la corrupción, mientras que el electorado de izquierdas no la tolera; prueba de esto es el caso de Móstoles, o el enorme daño que ha hecho en Andalucía el caso de los ERE, en tanto que al PP no le pasan factura sus desmanes.

La segunda es que el PP ha ganado estas elecciones dopado con los votos de Ciudadanos, un partido que ha ejercido de mamporrero del PP desde sus comienzos con Albert Rivera, hasta el final de sus días, dejando más de 1,5 millones de votos de herencia al PP y a VOX.

La tercera conclusión es que la izquierda ha venido gobernando, como casi siempre, con paños calientes (políticas liberales) en las políticas económicas y con paños socialdemócratas en las políticas sociales, algunas de estas última no ejecutadas con demasiada fortuna. Es la constatación de que cuando se pretende contentar a todos se suele molestar a la mayoría, principalmente a la mayoría del voto natural de la izquierda.

A lo anterior hay que añadir decisiones que el electorado de izquierdas ni entiende ni le gustan, por ejemplo:

  • En lugar de avanzar hacia el laicismo, o como mínimo respetar la aconfesionalidad constitucional, el Gobierno ha extendido a todas las religiones las exenciones de la que goza la Iglesia católica.
  • La posición de los partidos que se reclaman de la izquierda respeto a la defensa de los servicios públicos es poco clara, cuando no se han puesto de perfil. Es el caso de la escasa o nula implicación que los partidos y candidatos de la izquierda han tenido, salvo para hacerse fotos en las movilizaciones, en la defensa de la Sanidad Pública, recayendo el esfuerzo en las asociaciones médicas corporativas y en el resurgente movimiento vecinal, al menos en Madrid.

Tanto en los programas electorales, como en sus declaraciones, no queda clara la posición respecto a la colaboración público-privada como vía para la privatización. Lo que si suele quedar claro es la posición favorable a estas colaboraciones, y en coherencia ni una palabra respecto a compromisos que reviertan las políticas privatizadoras de la derecha, y de algunos gobiernos autónomos progresistas.

  • Es llamativo el “dejar hacer”, aun con posicionamientos de cara a la galería, en el seguidismo que nuestro país está haciendo del atlantismo. ¿Desde cuándo la izquierda avala el militarismo? Se echa de manos la posición del PSOE contra la guerra de Marruecos, plasmada en “El Socialista” del 19 de agosto de 1921, donde señalaban los dos tipos de patriotismo que había en España: el de las exaltaciones y el de los trabajadores. Rechazaban la guerra que siempre esconde intereses económicos, pero que son los hijos de la clase trabajadora quienes pagan con su vida. O el contundente rechazo de la guerra en Irak, en 2003.

Mientras se escatima en Educación, en Sanidad y en Dependencia, no se duda en incrementar los presupuestos militares.

  • A finales de 2021, se aprobó la Ley 21/2021. Esta Ley, aprobada con los votos de toda la izquierda, no se está cumpliendo en el importante mandato legal que establece que el Gobierno encargaría una Auditoría a las cuentas de la Seguridad Social, en el plazo de un mes (plazo que venció a finales de enero de 2022) y que presentaría un Informe de la Auditoría en el plazo de seis meses, plazo que venció a final de junio de 2022). De esta Auditoría depende se clarifique cuál es la cuantía de la “hucha de la Pensiones”. En lugar de cumplir con estos preceptos legales, se lleva a cabo una nueva reforma del sistema y se mantiene el falso mantra de la insostenibilidad de las Pensiones Públicas.
  • Los paños calientes del PSOE, junto con alborotos innecesarios de los socios de Gobierno, han dejado intacta la Ley Mordaza. Una Ley intolerable heredada del Gobierno del PP (Rajoy) que ataca derechos como la libertad de expresión y movilización.
  • Mientras que las grandes empresas y los comisionistas se han llenado los bolsillos, la clase trabajadora: asalariados y pensionistas, han visto como se han empobrecido con el alza de los precios (2021 y 2022 se ha perdido mucho poder de compra). Mientras que desde el Gobierno se adoptaban medidas paliativas de escaso y limitado alcance.

Ahora nos cuentan que el IPC está moderándose, que no significa que los precios bajen. Mientras el precio de la vivienda, en alquiler y en propiedad, no para de subir y se incrementa en cantidad insoportable los precios de las hipotecas.

Se podrían poner muchos otros ejemplos, pero el listado sería largo.

La izquierda debe dejar de hacer seguidismo del liberalismo que lleva a la clase trabajadora a la ruina y al mundo a la barbarie. Debe ser fiel a su razón de ser: un partido político es una herramienta para resolver problemas, si no es para eso es un estorbo.

Los partidos de la izquierda, incluidos muchos de sus militantes, asumen los mantras que se les imponen desde la derecha. Es llamativo que los apoyos que Bildu ha venido dando a lo largo de la legislatura; la mitad de esta campaña pasada ha versado sobre los exmiembros de ETA que figuraban como candidatos en la lista de ese Partido. Nosotros nada tenemos que ver con el mundo abertzale, pero nos negamos a cuestionar a ciudadanos que han cumplido sus penas y ahora se insertan la sociedad por la vía política. Por el contrario, se está asumiendo como “normal” que un partido abiertamente fascista (negacionista de la libertad y la democracia) forme parte de gobierno en todos los ámbitos del Estado.

Tanto los colaboradores de TS en sus artículos, como el Comité de Redacción en nuestras editoriales, lo venimos diciendo desde hace tiempo: entre la mayoría social se detecta la sensación de una gran orfandad política.

La misma determinación que ha demostrado el presidente del Gobierno para anticipar las elecciones generales al 23 de julio nos gustaría verla a la hora de adoptar políticas económicas que afronten los problemas de la mayoría y para cumplir con las promesas electorales que se hicieron, y eso va por todos y todas.

Comite de Redacción

Nicolás Redondo Urbieta.

Una vida de lucha, en defensa de los derechos de los trabajadores

Se ha ido Nico, el de la generación del 27, la obrera, no la literaria. Nació el 16 de junio de 1927, en Barakaldo. Sufrió en su infancia la guerra civil desatada por quienes no soportan los avances sociales y las libertades para la mayoría. Así, siendo niño, entre los 9 y los 12 años, soportó el hambre, el miedo provocado por los bombardeos y el exilio; con 11 años, junto a más de dos mil niños y niñas, embarcó en el Habana, que zarpó desde Santurce rumbo a Francia.

No regresaría hasta finales de 1939, para encontrase con la España del “Cara al Sol” y la represión.

Como era lo habitual en aquellos años, comenzó su vida laboral en la pubertad, en La Naval de Sestao, con 15 años. Nicolas fue de los que estudiaba y trabajaba; por la mañana en la Escuela Náutica y por la tarde en la fábrica. Participó en las primeras huelgas obreras contra el franquismo en 1946 y 1947, en las que se mezclaba la euforia por la victoria aliada en la IIGM, con la resistencia de los trabajadores en España contra la miseria y la sobre explotación. En aquellos años ya era militante de base de la UGT y del PSOE colaborando con el reparto de propaganda, lo que le supuso la primera detención, en la primavera de 1951.

Participó activamente en la huelga de la Naval del 30 de abril del 62, en solidaridad con la que se había desatado el 7 de abril en la mina asturiana de la Cuenca del Caudal, en el Pozo Nicolasa. No descasará de colaborar en los conflictos obreros de la década de los años 60 y en viajar por todo el territorio del Estado, haciendo proselitismo y organizando sindical y políticamente; actividad que conllevaba el riesgo de cárcel y de pérdida del puesto de trabajo. Comenzó a formar parte de las direcciones del PSOE y la UGT en 1970 y el 1971, respectivamente. La Naval le despidió en 1973, era uno de los “precios” que se corría el riesgo de pagar por ser coherente.

Fue en ese año de 1973 cuando, en el XII Congreso de la UGT, es elegido Secretario General por vez primera. Participó en todos los acontecimientos políticos, sociales y de Partido de la década de los 70, destacando su actitud inteligente y generosa en el Congreso del PSOE, celebrado en Suresnes, en el que optó por apoyar a Felipe González como Secretario General del PSOE, a pesar de que él contaba con apoyos suficientes para serlo, con el criterio de no dividir al Partido y optar por una persona más joven, con capacidad probada.

Fue uno de los diputados secuestrados en el Congreso de los Diputados el 23 de febrero de 1981. Su respuesta fue la de la defensa de la democracia llamando a la movilización y exigiendo la depuración de responsabilidades.

La década de los 80 comenzó alterada por el intento de golpe de Estado y continuó siendo dura para Nicolas Redondo, quizá la más dura ideológicamente, pero, en la adversidad, prevaleció su sentido de la coherencia y la lealtad a los intereses de la clase trabajadora: se opuso a la permanencia de España en la OTAN, en el referéndum de marzo de 1986; renunció a su acta de diputado, en octubre de 1987, por el desacuerdo con el Gobierno en las políticas económicas y el reparto de la riqueza, acto en el que fue secundado por las también diputados, Antón Saracibar y Cándido Méndez; convocó, junto a las CCOO de Marcelino Camacho, la huelga del 14 de diciembre de 1988, frente a las políticas “liberales” del Gobierno Socialista.

Tras una vida de lucha en defensa de los intereses de los trabajadores, en 1994 puso punto y final a su dedicación sindical al frente de la Unión General de Trabajadores, Nicolás ha vivido serenamente y siendo receptor del cariño y la gratitud de sus compañeros y compañeras. Sirvan estos párrafos para dar una pequeña idea y recordar quién fue este gran defensor de las libertades y los derechos de quienes viven de su salario.

Que la tierra te sea leve, compañero.

Roberto Tornamira
4-ene-2023

La agresión permanente a la Sanidad Pública

El 17 de octubre ha dimitido la gerente de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid. Pero es que en el verano defenestraron al director general de Asistencia Sanitaria y Aseguramiento del Servicio Madrileño de Salud y, al poco tiempo, fue cesado el gerente del Suma 112. Es llamativo el reguero de ceses y dimisiones en el área de Sanidad en el “paraíso de libertad”, según palabras de IDA, la presidenta de la Comunidad de Madrid. Un “paraíso” para las grandes fortunas “tax free”, para especular con la vida y la salud de los ciudadanos, y por supuesto para tomar cañas en las terrazas que han salido como setas de alquitrán aprovechando la pandemia.
Es precisamente libertad lo que les falta a los y las técnicos más sensatos que trabajan para la Administración sanitaria en Madrid, para ejercer su trabajo. Un proceso de depuración permanente levado a cabo por el Gobierno del PP en Madrid, que comenzó con la de la directora de Salud Pública, en mayo de 2020, por el riesgo de “colapso” de las UCI en la Comunidad de Madrid, contra la decisión de IDA de acelerar el pase a fase 1 del plan de desescalada: “dimití tras horas intentando convencer de que no cometieran una barbaridad”, escribió en su cuenta de Twitter, Yolanda Fuentes.
Unos meses después, en octubre de 2020, fue Alberto Reyero, no ya un técnico, sino un miembro del propio Gobierno de Ayuso, quien dimitió por la criminal acción política de negar la asistencia sanitaria a los ancianos y ancianas en residencias; unos 7.300 muertos solo en Madrid. El dimisionario ha publicado un libro cuyo título define qué ocurrió: “Morirán de forma indigna”.
Las dimisiones y los ceses no son más que una consecuencia concreta del caos reinante en el conjunto de la Sanidad Pública madrileña: “abandono de los usuarios y desprecio absoluto a los trabajadores y trabajadoras de este servicio público”, ha denunciado el secretario general de CCOO en Sanidad de Madrid, Mariano Martín-Maestro.
Un ejemplo claro de este caos, es el procedimiento por el cual las enfermeras debían atender pacientes cuando no hubiera médicos. Otra de las instrucciones, para enmarcar, del Gobierno presidido por IDA.
Las ocurrencias, algunas con efectos dramáticos, obedecen al Plan para la Atención Primaria cuyo objetivo no declarado, pero evidente, es la demolición de las Urgencias de Atención Primaria (UAP). Uno de los capítulos más groseros de dicho Plan es lo que el Gobierno de Díaz Ayuso llama: “Proceso de reestructuración de las urgencias extrahospitalarias”; unas urgencias que llevan medio cerradas desde marzo de 2020, cuyo objetivo real es un nuevo recorte de personal. Con la consecuencia directa del colapso de las urgencias hospitalarias.
Los bajos salarios, la inestabilidad laboral y precariedad en las condiciones de trabajo son consecuencia de los recortes presupuestarios del servicio sanitario en Madrid.
Los efectos son tremendos, no solo para los trabajadores de la sanidad, también para los madrileños y madrileñas que se ven obligados, pues nadie acude a urgencias o a una consulta médica por gusto, a ir a unas urgencias hospitalarias saturadas, y a soportar unas listas de espera grotescas, según datos oficiales: 300.000 pacientes tienen que esperar tres meses para ser atendidos por un especialista, 80.000 lo hacen para una prueba diagnóstica y 15.000 para una operación, por término medio.
El deterioro se corresponde con que la Comunidad de Madrid es la región del Estado español que menos presupuesto “per cápita” destina a Sanidad: 1.300,65 euros por habitante y año, frente a los 1.679,26 de gasto medio del resto de comunidades (datos presupuestarios para el ejercicio 2022), un 30% por debajo de la media.
Ante esta insoportable situación, los trabajadores del Servicio de Atención Rural (SAR), convocaron una huelga indefinida, que iba a dar comienzo el 25 de octubre. El anuncio de la huelga activó la repentina necesidad de negociar del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. A fecha de cerrar este artículo, el sindicato de médicos Amyts, el mayoritario, ha rechazado el preacuerdo, pues denuncian que “siguen sin entender cómo se pueden abrir 78 dispositivos con el personal de 40… y no están dispuestos a rebajar la calidad asistencial a los pacientes”.
El 28, está previsto que comience la huelga en las Urgencias del Hospital “Infanta Sofia” de San Sebastián de los Reyes. Por poner dos ejemplos de los conflictos que se viven en la Sanidad de Madrid, porque se cuentan por decenas las movilizaciones vecinales que se han llevado acabo en los barrios, en los últimos tiempos.
Se echa en falta una movilización coordinada, y sostenida en el tiempo, por las organizaciones que se reclaman de la izquierda, ante un problema general, para la defensa de uno de los pilares del Estado de Bienestar. Esperemos que la gran manifestación que tuvo lugar el sábado día 22 de octubre, de Neptuno a la Plaza de Sevilla, en Madrid, convocada por los principales sindicatos de la Sanidad Pública en Madrid, y apoyada por el PSOE, sea la primera de muchas movilizaciones en las que se le da posibilidad de participar a los ciudadanos y ciudadanas.

La única beneficiada de este caos, provocado, es la sanidad privada y los receptores de contratos como las constructoras y empresas de servicios del Zendal. Esto lo avalan los datos publicados por la prensa económica y de UNESPA, la patronal de empresas aseguradoras, que señalan 2021 como el mejor año para el negocio de las aseguradoras médicas privadas, al hacer públicos los datos al cierre del primer semestre de 2022, con unos ingresos de 32.965 millones de euros, un 4,43% más que en 2021. Un sector en el que el oligopolio conformado por: Segurcaixa Adeslas, Sanitas, Asisa, DKV y Mapfre acaparan el 74,17% del negocio.
“Mientras el Servicio Madrileño de Salud dejaba 402 millones de euros, del presupuesto de 2021, sin utilizar, se transfirieron 1.261 millones de euros públicos a la sanidad privada, un 31% más que en 2020”(1), denuncia Sara Plaza Casares en junio de este año.
Los datos demuestran que los efectos de la pandemia no son solo atribuibles al virus, y que el deterioro de la Sanidad Pública se corresponde con un plan trazado para reducir la Sanidad Pública a un servicio de mínimos, con tendencia a la beneficencia, en favor de los intereses del mercado libre, el único que es libre de verdad, según los parámetros de Díaz Ayuso.

Roberto Tornamira Sánchez
30oct22

(1) https://www.elsaltodiario.com/sanidad-publica/comunidad-madrid-aumenta-30percent-transferencia-fondos-publicos-sanidad-privada#:~:text=Sanidad%20p%C3%BAblica-,La%20Comunidad%20de%20Madrid%20aumenta%20un%2030%25%20la%20transferencia%20de,31%25%20m%C3%A1s%20que%20en%202020

Francia al rojo vivo

Desde que el pasado 19 de junio Emmanuel Macron perdió la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional las dificultades para aplicar las políticas neoliberales que representa el presidente de la Republica Francesa van en aumento y no solo en la cámara de representantes parlamentarios, también en las calles, en las centros de trabajo, en los centros de estudio y universidades, en la sanidad y en el sector educativo, encuentra una amplia contestación.

La Nueva Unión Popular Ecológica y Social (NUPE) convocó una gran manifestación en Paris para el pasado 16 octubre, en ella desfilaron sectores representativos de todo el país, jubilados, estudiantes, sanitarios y enseñantes que están padeciendo las consecuencias de la política que aplica Macron. La manifestación ha sido valorada como un éxito.

El martes 19 los sindicatos convocaron una huelga intersectorial que partía de los trabajadores de las empresas energéticas a las que se unieron los transportistas, enseñantes y sanitarios para reclamar aumentos salariales igual al IPC, además de las subidas salariales, los médicos pediatras demandaban el aumento de especialista para un sector en que faltan especialistas en medicina infantil y mas recursos para la sanidad, oponiéndose a la ley de financiación a la Seguridad Social que ha bajado su partida presupuestaria en 1.800 millones y el núme- ro de camas hospitalarias a disminuido un 12,4%, al mismo tiempo la partida destinada a gastos milita- res y de guerra es de 3000 millones de euros.

Los jubilados y pensionistas se manifestaban defendiendo el actual sistema de pensiones públicas que el Sr Macron quiere reformar para aumentar la edad de jubilación y el sistema de cómputo.

Los Liceos Profesionales tienen una carencia de profesores evidente debido a los continuos recortes. Profesores y estudiantes marchan juntos en defensa de la enseñanza profesional pública.

La NUPE que obtuvo 127 escaños en las ultimas elecciones, combina su trabajo parlamentario con el apoyo a los sectores que luchan por sus reivindicaciones, presento una moción de censura contra los presupuestos de Macron, moción que sirvió para poner al descubierto el verdadero carácter del Gobierno de la V República.

La primera ministra Elisabeth Borne tubo que aplicar por dos veces el articulo 49.3, articulo que algunos lo califican de dictatorial y golpista ya que permite aprobar propuestas de ley o presupuestos sin que estas sean votadas por los parlamentarios elegidos por el pueblo. Este articulo exige a la oposición una moción de censura o sea tumbar al gobierno. Para ello toda la oposición se tendría que poner de acuerdo, algo casi imposible. Como se pierde la moción de censura la ley es aprobada automáticamente. Así ha sido con el Presupuesto

La mayoría social en Francia no permitirá que se utilicen este tipo de prácticas demasiado asiduamente.

José A. Iniesta

Entrevista a Sergio Barbero

Delegado sindical UGT Productos Tubulares

Tribuna Socialista entrevista a Sergio Barbero, delegado de UGT en Productos Tubulares, empresa a la que dado los últimos 20 años de su vida. Con la reciente fusión con el grupo de empresas Tubos Reunidos, llevan al cierre de la aceria de Sestao en la que trabaja Sergio y el traslado de la plantilla a la factoría de Amurrio.

Pregunta.- ¿Nos podéis dar una visión global de la evolución de la empresa y como y porque se llega a la situación actual?

Respuesta.- El principio del problema viene de hace años. Después de dar unos beneficios enormes se hacen una serie de movimientos, como el intento de fusión de Tubos Reunidos con CODESA en 2007-2008, operación para la cual se pidió un crédito de casi 200 millones de euros, operación que al final no se llevó a cabo, pero el crédito no se devolvió. En años sucesivos se repartieron dividendos, dejando a la empresa descapitalizada, y endeudada. Eso, sumado a unos años malos en los que una crisis tras otra ha hecho reducir carga de trabajo y margen de beneficios… Ha terminado en una refinanciación de deuda de 350 millones, y ahora sumamos el rescate de la SEPI, que no deja de ser otro crédito de 112 millones más…

P.- ¿Cuántos trabajadores/as formáis la plantilla del grupo o por empresa? y ¿cómo afectan estos movimientos de la empresa a las condiciones de vida y trabajo de la plantilla?

R.- La plantilla aproximada es de 800 trabajadores en TUBOS REUNIDOS INDUSTRIAL (Amurrio), 400 en PRODUCTOS TUBULARES(Trápaga), de ellos unos 70 en la acería de Sestao y unos 40 en ACECSA (Navarra).Los afectados serían los 70 de la acería de Sestao, aunque aún no hay nada negociado ni sabemos en qué condiciones se van. Y los 40 de Navarra, a los que por distancia se les complicará aún más el traslado, y no sabemos qué pasará con ellos.

P.- En Septiembre ya se hablaba del traslado de la planta de Trápaga a Amurrio. El 28 de octubre iniciáis nuevas movilizaciones contra ese traslado. ¿Cuál es la situación actual, realmente no habrá ERE como prometía la empresa al anuncio de este traslado?

R.- El ERE se supone descartado, según nos dicen, en el acuerdo con la SEPI (no nos han enseñado el acuerdo) no se contemplan despidos traumáticos.

Eso sí, ya han despedido con indemnización a casi 60 trabajadores de 61 años o más: 18 de Trápaga, y los demás en el resto del grupo.

P.- Desde el sindicato, ¿en qué modo pensáis que la fusión de todas las sociedades: Tubos Reunidos en Amurrio, Productos Tubulares en Trápaga y Aceros Calibrados en Iruña, va a suponer un beneficio para los trabajadores más cuando está pendiente el cierre de la planta de Trápaga?

R.- Qué vemos desde la sección sindical de UGT en la planta de productos Tubulares. Pues que para los trabajadores todo son inconvenientes e incertidumbres: viajes, no saber a qué puesto van, no les aseguran que los que vayan a Amurrio sigan trabajando en la acería, hablan de distribuirles por otros puestos de la planta, lo que supone que los que ahora tienen contrato eventual en Amurrio ven peligrar su futuro en la empresa…pero claro, eso no son “despidos traumáticos”.

Desde Productos Tubulares, nos da miedo el futuro de nuestra planta, al dejar de ser una empresa independiente, pasamos a depender aún más, si cabe, del futuro del grupo y del futuro de la planta de Amurrio; nuestra planta no depende tanto como la de Amurrio del mercado del petróleo y de Estados Unidos. Con nuestra acería propia, podríamos salir airosos por nuestra cuenta. Y que decir de los navarros que incluso en los peores años han dado beneficios. Con la unificación de las empresas y las acerías, si cae Amurrio, caemos Todos.

P.- La incorporación de María Sicilia, directora de estrategia de Enagás, al consejo de administración del Grupo Tubos Reunidos ¿supone tranquilidad para la plantilla por los futuros contratos que puedan llegar o solo es maquillaje por parte de la empresa para justificar el rescate que está en el aire?

R.- Comentario de la plantilla… “¿Nos están regateando los IPC con el salario congelado desde el 2017, y contratan 2 consejeras nuevas?”

P.- A modo de conclusión ¿podéis decirnos qué es lo que más preocupa y qué queréis lograr con las movilizaciones y futuras negociaciones?

R.- Lo que más nos preocupa es la incertidumbre sobre el futuro de los trabajadores, y de la planta. Queremos que nos aseguren la continuidad de la planta de Trápaga, el mantenimiento de la plantilla con unas condiciones dignas, que no sean como siempre los trabajadores los que paguen por la avaricia de los accionistas…

Comite redaccion Tribuna Socialista

40 congreso del PSOE- El congreso de la unidad.

Por María Iglesias Domínguez- Periodista, Redacción Tribuna Socialista

El PSOE celebró el pasado fin de semana su 40 Congreso Federal en Valencia.

Un congreso clave en el que el partido quiso exhibir su unidad interna, después de un 39 congreso que devolvió la secretaria general a Pedro Sánchez tras haber sido defenestrado por el aparato y unas primarias muy duras que dejaron el partido roto; el otro objetivo del 40 congreso era el de reforzar su liderazgo de cara a las próximas citas electorales.

Los expresidentes del Gobierno Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, participaron en el encuentro que reivindicó el pasado y el presente del partido y ha sentado las bases para las próximas elecciones generales y la mayoría de las autonómicas, previstas en 2023.

La intención de la actual dirección del PSOE estaba clara, reforzar el mensaje de unidad que el partido socialista pretende afianzar, además de los expresidentes y de Joaquin Almunia (también secretario general del PSOE junto al gran ausente, Alfredo Pérez Rubalcaba) estuvieron presentes barones, ministros y exdirigentes, aunque no todos con el mismo mensaje ni con las mismas ganas de cerrar unas heridas que aún sangran en muchos sectores del partido. Y a pesar de ello y para muestra de esa reconciliación, el abrazo entre los dos históricos del partido, González y Zapatero, y Sánchez.

Los mensajes fueron muy diferentes en el caso de Zapatero y González, también los aplausos con los que fueron recibidos los mismos. Zapatero repitió o en su intervención que es un PSOE que solo piensa en el futuro de España y que es el centro de gravedad de la política española, un partido necesario, fue ovacionado de manera permanente. 

Mientras que González, defendió el régimen del 78, dijo estar disponible y se ofreció a Sánchez con lealtad ante un proyecto que encabezó durante 23 años, pero con libertad para ser crítico. «Yo no interfiero, estoy disponible. Ni siquiera pretendo que se tome en cuenta mi opinión», eso sí defendió de manera clara la gestión del Ejecutivo durante la pandemia, aunque sin citar a Sánchez tal como se esperaba de él.

El congreso había sido planeado meticulosamente, para que nada quedara al azar, pensado para remarcar una y cientos de veces la palabra unidad, algo que parece que se consiguió.

El debate de las enmiendas en la que algún presidente de las comisiones de trabajo como es el caso de Rafael Simancas, no permitieron pasar a plenario para su voto posiciones claras de la militancia como es el caso de la república defendidas por Izquierda Socialista y Juventudes Socialistas( despachadas en el texto con unas cuantas frases con poco contenido) y la falta de debate con la que el presidente del congreso, Ximo Puig despachó la gestión, fueron los elementos más discordantes de un congreso que por lo demás consiguió la mayoría de los objetivos que se había marcado.

El discurso con el que el secretario general cerró el congreso, hablaba de unidad y de reivindicar el legado del PSOE durante toda la historia de la democracia, en España y en el mundo y especialmente en Europa, donde ha ido ganando lentamente terreno a la derecha.

Sánchez subrayó los compromisos con los que se presentó a las elecciones que emanan de la resolución política que los delegados y delegadas respaldaron este sábado, tras transaccionar y debatir numerosas enmiendas y sin tiempo para el debate, el presidente subrayó que Gobierno avanzará poniendo punto final a la ley mordaza y a la reforma laboral del PP, impuestas sin acuerdo, que precarizaron contratos y devaluaron salarios que ayudará a fortalecer Europa y llevará «a término» la abolición de la prostitución, «que esclaviza a las mujeres en nuestro país». Esta fue una de las demandas más contundentes del cónclave socialista.

Se detuvo en la pandemia, en los primeros momentos de ésta, cuando todavía casi todo era un misterio y contó como recibió el aliento de sus compañeros. Mostró su gratitud a los ministros actuales y a los que salieron del Gabinete, a los barones, alcaldes, concejales, a todos los que estuvieron para luego agradecer a los trabajadores y trabajadoras de los servicios esenciales que nos permitieron seguir adelante….

La pandemia “ha hecho aún más reconocible a un PSOE que ha sido leal a sus valores y principios y a un Ejecutivo que ha cumplido sus palabra», desplegando una exitosa campaña de vacunación (el 90% de la población mayor de 12 años tendrá pauta completa a finales de año) y aprobando las peticiones de sindicatos como el ingreso mínimo vital, la protección de los ertes, la ley de eutanasia o la subida del salario mínimo. «

“Hemos gobernado con serenidad, y no nos lo han puesto fácil, con un sentido profundo de la justicia social, el PSOE suma la experiencia de los mayores a la esperanza de nuestros jóvenes» continuo Sánchez

Y así desgranó una discurso en el que defendió la socialdemocracia como única forma de gobernar para todos y el ya clásico, “no dejar a nadie atrás”.

El mensaje de unidad que durante todo el congreso exhibió el PSOE, fue avalado y certificado por los delegados y delegadas, casi el 95% dio el si a su propuesta de nueva ejecutiva federal, de 42 miembros.

Las federaciones de Andalucía y Madrid son las que tienen más peso en la nueva Ejecutiva diseñada por Sánchez, en la que todos los territorios están representados, y mantienen un papel relevante Cataluña, Comunidad Valenciana y Castilla y León.

La nueva ejecutiva

La nueva cúpula socialista mantiene 12 miembros de la saliente e incorpora 30 caras nuevas, son un total de 42 miembros, frente a los 46 de la Ejecutiva anterior, una cifra algo más reducida.

En la Ejecutiva Sánchez ha incluido a seis ministros: Félix Bolaños (Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática), Carolina Darias (Sanidad), Diana Morant (Ciencia e Innovación), María Jesús Montero (Hacienda), Isabel Rodríguez (portavoz) y Pilar Alegría (Educación).

En lo que se refiere a la representatividad territorial, todas las comunidades autónomas estarán representadas en la nueva ejecutiva socialista. Si se computan los integrantes de la Ejecutiva Federal con cartera, los vocales y los miembros natos, el resultado es que nueve de los 47 representantes son andaluces y siete madrileños.

Cataluña, Comunidad Valenciana y Castilla y León contarán con cuatro representantes dentro de la dirección federal, mientras que Canarias tendrá tres.

Euskadi, Galicia, Aragón y Castilla La Mancha tendrán dos representantes cada una de ellas. El resto de autonomías contarán con un miembro en la dirección federal, donde también habrá una representante de la ciudad autónoma de Melilla.

El congreso de la unidad del PSOE

El 40 Congreso del PSOE ha mostrado un partido que según la Ponencia Marco de esta edición aprobada, se reivindica como feminista y reformista.

Si atendemos a las valoraciones de la militancia que acudió a dicho congreso, no ha tenido nada que ver con el último, que se celebró en 2017 con el lema oficial “Somos la izquierda” y que tuvo el menor respaldo a su ejecutiva en 20 años y sin embargo, esa misma militancia que arropó a Sánchez a la secretaria general, se quejaba de la falta de debate y del papel insignificante que había jugado la misma en dicho congreso.

La ejecutiva de Pedro Sánchez ha obtenido un 94,94 % de apoyos, frente al respaldo de 2017, que fue del 70,50%.

Los nombres y cargos de la nueva ejecutiva

  • Presidenta: Cristina Narbona Ruiz (Madrid).
  • Secretario General: Pedro Sánchez Pérez-Castejón (Madrid).
  • Vicesecretaria General: Adriana Lastra Fernández (Asturias).
  • Secretario Organización: Santos Cerdán León (Navarra).
  • Secretaria Igualdad: Andrea Fernández Benéitez (CyL).
  • Secretaría de Estrategia y Acción Electoral: Javier Izquierdo Roncero (CyL). 
  • Secretaría de Política Municipal: Alfonso Rodríguez de Celis (Andalucía). 
  • Secretaría Política Autonómica: Guillermo Fernández Vara (Extremadura). 
  • Portavoz: Felipe Sicilia  Alférez (Andalucía).
  • Secretaría Justicia, Relaciones Institucionales y Función Pública: Llanos Castellanos Garijo (Madrid).
  • Secretaría de Estudios y Programas: Idoia Mendia Cueva (Euskadi).
  • Secretaría Política Internacional y Cooperación al Desarrollo: Hanna Jalloul Muro (Madrid).
  • Secretaría Transportes, Movilidad Sostenible y Agenda Urbana: Arcadi España García (C. Valenciana).
  • Secretaría de Memoria Democrática y Laicidad: Patxi López Álvarez (Euskadi).
  • Secretaría Reto Demográfico: Maite Pérez Esteban (Aragón)
  • Secretaría Unión Europea: Iratxe García Pérez (CyL).
  • Secretaría de Transición Ecológica Justa y la Preservación de la Biodiversidad: Marc Pons Pons (Baleares)
  • Secretaría de Política Economía y Transformación Digital: Pedro Casares Hontañón (Cantabria).
  • Secretaría Cultura y Deportes: Manuela Villa Acosta  (Madrid)
  • Secretaría para el Pacto de Toledo y la Inclusión Social: Juan Francisco Serrano Martínez  (Andalucía)
  • Secretaría de Industria, Comercio y Turismo: Patricia Blanquer Alcaraz (C. Valenciana)
  • Secretaría de Trabajo, Economía Social y Trabajo Autónomo: Montse Mínguez  García (Cataluña).
  • Secretaría de Formación: María Márquez Romero (Andalucía) 
  • Secretaría de Educación, Formación Profesional: Mª Luz Martínez Seijo (CyL).
  • Secretaría de Ciencia, Investigación y Universidades: Diana Morant  Ripoll (C. Valenciana).
  • Secretaría de Movimientos Sociales, Diversidad y Mayores: Beatriz Carrillo De los Reyes  (Andalucía).
  • Secretaría de Transparencia y Regeneración Democrática: Francisco Lucas Ayala  (Murcia)
  • Secretaría Emprendimiento e Impacto Social: Amparo Marco Gual  (C. Valenciana)
  • Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca: Ana Mª Romero Obrero (Andalucía)
  • Secretaría de Sanidad y Consumo: Carolina Darias San Sebastián (Canarias)
  • Secretaría para la Reforma Constitucional y Nuevos Derechos: Félix Bolaños García  (Madrid)   
  • Secretaría LGTBI: Víctor Gutiérrez  Santiago (Cataluña)
  • Secretaría del PSOE Exterior: Pilar Cancela Rodríguez (Galicia).
  • Secretaría de Políticas Migratorias y Refugiados: Luc André Diouf (Canarias).

Por la recuperación del socialismo

Conocí de la existencia de Tribuna Socialista en una conferencia “Per la recuperació del Socialisme” un sábado de febrero del 2014 a las 10 de la mañana en el Casal del Barrio de Ciudad Cooperativa. A través de mi militancia política y sindical, había conectado con el compañero José Iniesta que me había invitado al acto.

Descubrí un grupo de debate donde mis opiniones no eran la corriente minoritaria sino que eran compartidas y matizadas por los compañeros y compañeras que opinaban abiertamente y de manera muy crítica con su propio partido y lo hacían con la intención de ayudar a construir y recuperar el socialismo desde la base obrera. El debate seguía vivo y en el número de aquel mes de Tribuna se defendían los derechos y libertades que con la escusa de la crisis, el capital se afanaba en recortar para acabar de desmantelar el Estado del Bienestar. También en aquel número venia un artículo en defensa de los sindicatos. Me interesaba.

Desde aquel día he sido lector intermitente del Tribuna Socialista. En un tiempo dominado por la brevedad del tweet, a menudo plagado de teatralidad, inmediatez y liviana superficialidad, la apuesta comunicativa de Tribuna Socialista exige un parar la partida de ping-pon y hacer el esfuerzo de compresión, disponer de un momento de reflexión. Es una apuesta arriesgada, a contracorriente, pero vale la pena porque nos habla desde la convicción del verso libre que no está obligado a seguir pautas, ni someterse a intereses espurios, ni eufemismos: la abdicación fue una claudicación del monarca.

La habitual presencia de artículos relacionados con el internacionalismo, sindicalismo, socialismo y movimiento obrero hacen de la Tribuna Socialista un espacio de opinión y análisis necesario para las reivindicaciones de la clase obrera, sindicales, de la laicidad, de la juventud, de la autodeterminación de los pueblos libres del estado español con una voz independiente dentro del partido, integradora, apostando por la unidad y respetando la pluralidad. Actúa  como punto de encuentro, aportando opiniones de militantes socialistas de las diferentes organizaciones y territorios de los partidos socialistas del estado.

En el último número que he leído, publican un artículo sobre las recetas que, para superar la crisis actual, nos quieren imponer los “organismos y sus elegantes directivos” como los de la OCDE y la traslación de estas medidas a un lenguaje directo con las implicaciones concretas. La crítica en Tribuna para empezar y a continuación la propuesta socialista, por contraposición. Las cosas claras.

Por todo esto, y sin estar siempre de acuerdo con sus propuestas y análisis, por su inconformismo, tenacidad, modestia, constancia, contundencia, convencimiento, libertad, espero que siga durante muchos años más publicando opiniones que nos ayuden a conformar la opinión pública y hacer caminar esta sociedad hacia la República Federal de los pueblos libres del estado español.

Paco Ramos

Socialista y sindicalista

Información obrera saluda los 15 años de TS

15 años por el socialismo, por la república.

En la historia de nuestro país, y en particular del movimiento obrero, la perspectiva socialista ha estado asociada a abrir el camino a la república. Hoy, en que la incapacidad del sistema de producción capitalista para hacer frente a un reto tradicional de la humanidad: una pandemia, abrir esta perspectiva es fundamental.

Tribuna Socialista, desde nuestro modo de ver, ha combatido estos años por restablecer esta unidad  entre Socialismo y República. Y hoy república, quizás más que nunca, se asimila al conjunto de aspiraciones sociales y democráticas de los trabajadores y los pueblos de nuestro país. No se trata simplemente de cambiar un rey por un presidente.

Las circunstancias nos señalan que, la defensa de estas aspiraciones, chocan abiertamente con el modo de producción capitalista y la propiedad privada de los medios de producción.

La CEOE declara «Deuda (del Estado) no impuestos (a ellos)», certifica por tanto la incapacidad de un sistema para responder a las necesidades de la mayoría. Y la monarquía -al lado de sus corruptelas- es la firme defensora de esta patronal y de las instituciones heredadas.

Es por ello que, para nosotros, en la perspectiva de dotar a los trabajadores y los pueblos de los instrumentos políticos útiles para su emancipación, el trabajo de Tribuna Socialista es insustituible. Larga vida a Tribuna Socialista Por el socialismo, la república y el derecho de los pueblos.

Ángel Tubau

Comité de Redacción de Información Obrera

UNA DÉCADA Y MEDIA

Se cumplen 15 años de la “refundación” de Tribuna Socialista, una revista mensual cuyo descubrimiento para mí supuso en un primer momento el confrontar mi punto de vista sobre problemas y temas de actualidad, o simplemente de pensamiento y filosofía política, con el punto de vista que sobre ellos tenían desde otras partes de España otros compañeros siempre desde el paradigma del amplio pensamiento de la izquierda en su conjunto y específicamente desde el pensamiento socialista.  Y que después en un segundo momento, más próximo este en el tiempo, me ha permitido no solo enriquecer mi pensamiento en la reflexión confrontada, sino expresar mi punto de vista en diversos artículos que he venido escribiendo para Tribuna Socialista y que espero seguir haciendo de una forma más prolífica si tengo la oportunidad de ello.

15 años, una década y media, visto en términos existenciales no parece mucho, visto en términos políticos es una barbaridad. Arrancaba esta nueva etapa de Tribuna Socialista con un recién elegido Presidente José Luis Rodriguez Zapatero tras el peor atentado que había sufrido España en su historia. La derecha lo recibió con una rabia incontrolada que subió la tensión en el país hasta límites que no habíamos conocido durante todo el periodo democrático, el ambiente en el Congreso y en el Senado era sencillamente irrespirable por las acusaciones de la derecha, se llegó a acusar al Presidente de traicionar a los muertos de ETA, los titulares y los artículos de opinión en los medios de comunicación afines a la derecha no daban tregua. Aun así se completaron dos legislaturas muy fecundas en derechos sociales, basta recordar las leyes de Igualdad de Género, de Protección de las víctimas de violencia machista, de derechos LGTBi igualando los derechos de parejas y los matrimonios, la Ley de dependencia que reconocía derechos y aportaba un paraguas económico, social y laboral a las personas dependientes o discapacitadas, etcétera; mucho se ha escrito sobre esto, no vendré ahora a ahondar más en este sentido. La segunda legislatura de Zapatero se la llevó por delante una de las peores crisis mundiales que el sistema capitalista ha sufrido, una crisis cuyo origen hay que buscarlo en la especulación económica salvaje de un sistema que antepone el interés económico de los poderosos a la vida de las personas; mucho se ha escrito también de esto y al igual que antes tampoco vendré ahora a ahondar más. Por cierto durante estas legislaturas el Gobierno de Zapatero, (el acusado de traicionar a las víctimas) con Rubalcaba como ministro del interior desarrolló una línea política que finalmente llevó al fin de ETA.

Luego llegaron dos legislaturas de gobierno de la Derecha, Rajoy llevó a España a sus peores datos de protección social, se prohibió el acceso universal a la sanidad, se impuso el copago farmacéutico, se recortó en cualquier tipo de prestación ya fuese desde una simple beca escolar o académica a la prestación por desempleo, se dejó en papel mojado la Ley de Dependencia, los desahucios crecieron como nunca en toda España, se antepuso el pago de deudas al rescate de personas, pero se rescataron bancos. En pocas palabras se situó los intereses económicos  por delante de las necesidades y la vida de las personas, y también se perdieron muchos, muchos derechos, tanto laborales con la reforma impuesta por el gobierno contra sindicatos y trabajadores, como sociales con la llamada Ley mordaza entre otros. Así mismo el llamado ‘problema catalán’ le estalló al gobierno, fruto de la simbiosis de cómo se gestionó la crisis económica y de la nula o inexistente gestión política de la derecha ante el sentir de una gran parte de la sociedad catalana; tampoco me extenderé más en estos asuntos.

La última legislatura del Gobierno de Rajoy se la llevó por delante la primera Moción de Censura que triunfa en la reciente historia democrática de España. “La Moción de la Dignidad” consiguió el apoyo de todos los partidos de la Cámara, con la excepción obvia del partido del Gobierno: el PP, y la excepción no tan obvia del otro partido de implantación nacional de ‘centro derecha’: Ciudadanos. Todos los demás se unieron para finiquitar un gobierno apabullado y noqueado por los incesantes casos de Corrupción del PP allí donde gobernaba o lo había hecho.

Finalmente llegaron dos elecciones generales, ambas ganadas por el PSOE y la formación del primer gobierno de coalición de izquierdas desde la República. Una legislatura política que ha comenzado con una pandemia sanitaria como no se conocía desde hacía más de un siglo, la cual amenaza con una traer una nueva crisis económica aún más dañina que la sufrida en la década anterior. El fascismo ha agrandado sus tentáculos, no solo en España sino en el mundo en general, aquí ha llegado a las instituciones desgajándose del PP y dando nacimiento a un partido de extrema-derecha que ha robado votos al PP al haberse divido sus tradicionales votantes, lo cual ha provocado que tanto la nueva (vieja) extrema derecha como la derecha extrema de siempre y sus medios de comunicación hayan  vuelto a reeditar la campaña de acoso y derribo al gobierno, tal como ya intentaron durante la primera legislatura del Gobierno de Zapatero. No obstante este nuevo Gobierno de Izquierdas ya ha dado señas inconfundibles de encarar esta crisis de un modo radicalmente opuesto a como se hizo anteriormente, el lema, como el gobierno no deja de repetir es: “no dejar a nadie atrás”; igualmente no entraré tampoco ahora a analizar ni las medidas, ni las características, ni las consecuencias de todo esto último, estoy completamente seguro que en los números posteriores de Tribuna Socialista todos y todas los que formamos parte de ella y nuevos y nuevas, que sin duda se nos unirán, desarrollaremos nuevos artículos en los que desglosaremos, analizaremos, pensaremos y opinaremos sobre todo esto y mucho más.

 

Con este último deseo me despido de todos los lectores hasta mi próximo artículo, hasta entonces:

¡Salud y República!

Jose Luis Bejarano Damas

Licenciado en Historia y Secretario de Política Institucional de la Agrupación del PSOE de Almensilla-Sevilla.

 

En los 15 años de Tribuna Socialista

En Latinoamérica hay una fiesta de presentación de las jóvenes en la sociedad, que se celebra a los quince años.  Pues los quince años de Tribuna Socialista, no suponen ninguna presentación en sociedad, porque TS surge desde el primer día de las entrañas mismas de la sociedad, para ser más precisos de lo más profundo del movimiento obrero.

Hay tres características que marcan el desarrollo de TS: de clase, socialista y libre.

De clase cuando esta es una definición que se busca diluir en términos más genéricos como gente, ciudadanía, pueblo, los de abajo (que no creo que haya que renegar de usarlos) pero que sigue teniendo el mismo sentido profundo que tuvo en el nacimiento del movimiento obrero y que debemos trabajar incesantemente por rescatar, porque es uno de los valores en los que se asienta cualquier movimiento de transformación social. Hoy quien apela una y otra vez al carácter de clase son precisamente los privilegiados de la sociedad, no solo marcan el carácter de clase (como hacen Trump o Buffet) sino incluso el odio de clase (imaginar por un momento a Cayetana, Monasterio o Díaz Ayuso).

Socialista porque TS tampoco cae en eufemismos, sino que lucha abiertamente por otro tipo de sociedad donde el hombre no sea explotado por el hombre. No es TS una publicación que busca “humanizar” la barbarie capitalista sino que define claramente el carácter bárbaro de un sistema que no sólo explota a la humanidad sino que destruye el planeta. TS se inscribe en la máxima que la imperecedera Rosa Luxemburgo nos lego: “socialismo o barbarie”.

Libre, porque TS ejerce de tribuna de libertad, donde las opiniones, sensibilidades y visiones son plenamente respetadas y no como sucede en tantos ámbitos de la izquierda, donde primero se mira lo que opina “el jefe” para tomar posición.

Por ultimo quiero felicitar a todo el Comité de Redacción que la ha hecho posible en todos estos años, y de forma especial a mi amigo Roberto Tornamira, incansable animador de esta magnífica realidad.

Enrique del Olmo

Miembro de la Fundación Andreu Nin

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