EL BAÑADOR

Relatos veraniegos por Vicente Mateos

El bañador es protagonista sin igual del veraneo e indicador de la evolución en la liberalidad social a la hora mostrar el cuerpo. Cuando solo veraneaban los aristócratas y burgueses ricos, finales del siglo XIX, bañarse suponía embozarse en bañadores de cuerpo entero por pudor, y porque la piel morena estaba mal vista por ser propia de trabajadores menestrales. Tener la epidermis sin mácula por el impacto del sol era un signo de clase social, por eso en las playas había cabinas unipersonales de madera o tela de rayas azules y blancas o rojas y blancas, para salir de la playa perfectamente vestidos tras un chapuzón. Así lo vi en la playa de la Victoria en Cádiz, desde la borda del barco que me traía a la península desde Canarias (1971).

Con el tiempo, veranear se popularizo y el bañador ajustado se convirtió en una necesidad insustituible durante la canícula lo que supuso un cambio radical: estar moreno paso a ser un signo belleza, por la evolución en la ampliación de las partes del cuerpo expuestas al sol y a las miradas, al compás de las modas que no han ido a la par en mujeres y en hombres. Si los femeninos se han ido reduciendo, los masculinos han evolucionado al revés desde los sesenta cuando estaban de moda los pequeños y ajustados, los famosos Speedo de los nadadores olímpicos, que con el tiempo han acrecentado su tamaño hasta el bañador bermuda, incluso, hasta la rodilla.

En cambio, los femeninos han ido reduciendo sus dimensiones desde el bañador de cuerpo entero, pasando por el bikini y el trikini, hasta los de una sola pieza que cubre el sexo y dejan al aire senos y nalgas, convirtiendo la playa en una pasarela de sensualidad, con un punto de inocencia juguetona. Esa es la fuerza telúrica del bañador la de ser árbitro en el juego eterno de los sexos al inducirnos la disyuntiva de enardecer el deseo de tocar, acariciar o amasar con delicadeza el poder sexual de las partes que están al descubierto; o estimular la imaginación sobre lo que, con un punto de picardía, no se ve, paro se intuye en turgencia y dimensión. Qué es más gustoso: ¿lo evidente o lo imaginativo? En la playa todos somos observadores y observados.

Que la piel luzca un cierto grado de coloración cutánea aumenta el sexapell, ya lo sabían las mujeres de los años sesenta y setenta del siglo pasado, que se aplicaban ungüentos auto preparados a base de aceite y yodo, para que los rayos solares las tostaran. Aunque hoy pica más y hay que protegerse de él, lo cierto, es el estímulo para los sentidos que es ver los cuerpos impregnados del aroma salino que aporta el baño y el moreno que imprime la brisa marina —regulado siempre por el bañador— tras pasear por la orilla con los pies mojados por el oleaje, que llega, muere y rehace, sin fin, al borde del mar.

El azar y la necesidad. Parte 2


Por Manuel Ruiz Robles
(exmiembro de la Unión Militar Democrática)

Hace ya ocho años, en la primavera de 2017, pasaba unos días apacibles junto a mi compañera Rosa en la costa de la Axarquía. El azar cambió repentinamente el curso de los acontecimientos. A medianoche sentí un malestar intenso y decidimos acudir al hospital comarcal más cercano, en donde una doctora amabilísima realizó un diagnóstico previo. Era la madrugada del 15 de mayo.

Esperamos pacientemente la llegada de un joven cirujano, que, a la vista de los síntomas, ordenó mi traslado inmediato al quirófano. Tras firmar el preceptivo consentimiento informado el anestesista procedió a “dormirme”. Tres horas después, ya operado, desperté de la anestesia. La biopsia dictó el diagnóstico definitivo: se trataba de un cáncer de colon. Mi probabilidad de seguir vivo cinco años, en la mejor de las hipótesis, era del 50 %.

De regreso a nuestro domicilio en la Comunidad de Madrid, unos días después, se inició mi tratamiento en un hospital público. Durante un interesante cuestionario, voluntario y anónimo, se me pidió responder a la siguiente pregunta: ¿Prefiere ponerse en manos de Dios o en manos de la Ciencia?

En manos de la Ciencia

No soy religioso, por tanto no dudé en apostar por la Ciencia. Así que di mi consentimiento al tratamiento: seis meses de quimioterapia y cinco años de seguimiento hospitalario exhaustivo (RMN, TAC, PET, análisis.). Pese a todo, no abandoné mi activismo político, que me vincula radicalmente a los seres humanos, y me esforcé a la vez en alcanzar mi completa curación, como así ha sido, gracias a la Ciencia, al excelente personal sanitario que me atendió y al apoyo de mis seres queridos.

A lo largo de la historia, la humanidad se ha planteado: ¿Cuál es la finalidad del Universo? ¿Tiene sentido la vida? ¿Pervive la conciencia después de la muerte? Estas cuestiones han sido abordadas en el pasado por las religiones, pero la ciencia moderna ha posibilitado un enfoque radicalmente distinto. Uno de los momentos más significativos fue la publicación en 1970 de la obra de Jacques Monod, El azar y la necesidad.

En este modesto artículo intento explorar la vertiente científica y filosófica del pensamiento de Monod, contrastándola con la visión religiosa del mundo.

Azar, necesidad y objetividad

Jacques Monod (1910-1976), uno de los fundadores de la biología molecular, premio Nobel de medicina (1965) y miembro de la resistencia francesa durante la ocupación nazi, desarrolló en El azar y la necesidad una visión profundamente científica y existencial del mundo. Su tesis central es que la diversidad de la vida es producto del azar (mutaciones aleatorias en el ADN) y la necesidad (las leyes de la física y la química que rigen el comportamiento de los sistemas biológicos) junto a la presión selectiva del medio, que implica adaptación o extinción. No hay propósito, ni diseño, ni intención: solo una estructura regulada por las leyes de la materia.

Monod defiende el principio de objetividad como base teórica de la ciencia. Este principio exige que el conocimiento científico se base exclusivamente en observaciones verificables, sin recurrir a finalidades ocultas, principios sobrenaturales o valores morales impuestos desde fuera del sistema. En este sentido, afirma que la ciencia ha llegado a una conclusión filosófica fundamental: que el universo no tiene propósito, que la vida no tiene sentido intrínseco y que el ser humano es un producto accidental de procesos ciegos.

La religión no es simplemente un error epistemológico (parte de la filosofía que trata del origen del conocimiento científico, de cómo se obtiene y de su validez), sino una forma ancestral de pensamiento que responde a pulsiones humanas muy potentes: la búsqueda de sentido, el miedo a la muerte, la necesidad de cohesión social. La mente humana -evolucionada para interpretar el mundo en términos de causa y efecto- tiende naturalmente al pensamiento teleológico: asignar propósitos a los fenómenos, imaginar intenciones donde no las hay.

Para el científico, la única postura coherente es aceptar la verdad científica en toda su crudeza: somos el resultado de un proceso ciego y sin propósito. Esta aceptación, lejos de deshumanizarnos, debería ser el punto de partida para una ética basada en la libertad y la responsabilidad.

Materialismo dialéctico

Aunque Monod no se vincula explícitamente al materialismo dialéctico, e incluso toma cierta distancia, hay elementos comunes entre su enfoque y ciertos principios de este método filosófico. El materialismo dialéctico, formulado por Marx y Engels, parte de la premisa de que la materia es la realidad última, que los procesos naturales y sociales están en constante cambio y contradicción, y que el conocimiento surge de la interacción práctica con el mundo.

Ambas visiones -la de Monod y la del materialismo dialéctico- comparten un rechazo a toda metafísica trascendental y una confianza en el conocimiento científico como guía para transformar la realidad. El materialismo dialéctico no concibe al universo como producto de un ser creador, sino como resultado de procesos objetivos e históricos, regidos por leyes materiales. Del mismo modo, Monod describe la evolución biológica como un proceso regulado por leyes físicas, sin dirección ni propósito.

Ética sin trascendencia: la libertad como imperativo

Uno de los aportes más importantes de El azar y la necesidad es su propuesta ética. Si la vida no tiene un sentido intrínseco, si no hay un dios que dicte el bien y el mal, entonces los seres humanos son radicalmente libres. Pero esa libertad conlleva una responsabilidad: la de construir valores, instituciones y normas que no estén basadas en la obediencia a un ente superior, sino en el consenso racional y en el respeto a la dignidad humana.

Aquí, Monod se alinea con el humanismo ateo, confluyendo con los pensadores existencialistas de su época: Albert Camus, Jean-Paul Sartre y Simone de Beauvoir; también con la tradición marxista que ve en la emancipación del hombre -tanto de la religión como de la explotación material- un objetivo histórico. En ambos casos, se trata de superar la alienación: la religiosa, que atribuye nuestros destinos a una voluntad divina; y la económica, que reduce al ser humano a un objeto de producción.

Esta ética sin trascendencia no es relativista, sino que se funda en el principio de objetividad, en la necesidad de construir una moral que no se base en dogmas, sino en el conocimiento científico, en la cooperación social y en la autolimitación racional.

El conflicto ideológico

A pesar de los avances científicos, el conflicto entre ciencia y religión no ha desaparecido. En muchas regiones del mundo, el creacionismo se enseña en las escuelas; se niega la evolución; se rechazan vacunas por motivos religiosos; se legisla basándose en dogmas y no en evidencias. La racionalidad científica sigue siendo, para amplios sectores, una amenaza a valores tradicionales profundamente arraigados.

Monod advertía que esta resistencia no era meramente intelectual, sino política: la religión es una fuerza social que articula identidades, poderes y privilegios. Por eso, el conflicto entre ciencia y religión no es solo una disputa de ideas, sino una lucha por el control del imaginario colectivo. Y en esa lucha, la ciencia, por más poderosa que sea en el plano teórico y práctico, sigue siendo vulnerable.

La persistencia de la religión no se debe solo a una inercia cultural, sino también a condiciones sociales que la reproducen: desigualdad, ignorancia, alienación. La emancipación de la humanidad, entonces, requiere no solo educación científica, sino transformación estructural.

París, 14 de agosto 2025

Capitulo anterior: El azar y la necesidad. Parte 1

13 Canciones con Poder


Edición especial por el 20º Aniversario de TS

2005-2025

Presentación


Para celebrar el 20 aniversario de Tribuna Socialista hemos recuperado y compilado las 13 cancionesque hemos editado desde enero de 2022.
Reproducimos también los comentarios introductorios que a estas canciones elaboraron distintos colaboradores de Tribuna Socialista. Las canciones y los comentarios, guardan relación con los asuntos de preocupación social en el momento de su publicación: la guerra, la DANA en Valencia, el genocidio en Palestina, son algunos de los temas tratados, así como la recuperación y resituación de canciones que son seña de identidad de la izquierda y el movimiento obrero de nuestro país y/o internacional.
Junto al título de la canción reseñamos el número de Tribuna Socialista en el que fue publicada. Y al final de cada canción hay un enlace para visionar y escuchar cada tema, en versiones que en su momento nos parecieron las más originales.

Roberto Tornamira
Presidente de ASTRADE y miembro fundador de Tribuna Socialista

1.- La Internacional (TS-130 enero 2022)

2.- Al Alba (TS-131 febrero 2022)

3.- “Bella Ciao” (TS-132 marzo 2022)

4.- Himno de Riego (TS-133 abril 2022)

5.- “Grandola vila morena” (TS-134 mayo 2022)

6.- El pueblo unido jamás será vencido (TS-135 junio 2022)

7.- Vientos del pueblo me llevan (TS-136 septiembre 2022)

8.- “Blowin in the Wind” (TS-137 octubre 2022)

9.- “Cuervo ingenuo” (TS-138 noviembre 2022)

10.- “La Hoguera” (TS-139 diciembre 2022)

11.- La Santa Espina (TS-158 septiembre 2024)

12.- Nana urgente para Palestina (TS-159 octubre 2024)

13.- “Al vent” (TS-160 noviembre 2024)

Habemus Papam

Pocas veces ha habido tanta especulación política y debate en los medios de comunicación, sobre la identidad y tendencia del Papa que tenían que elegir el mayor número de Cardenales en la historia de los Cónclaves, 133, que al final han optado por el cardenal Robert Francis Prevost, que gobernará de ahora en adelante la Iglesia católica con el nombre de León XIV. Elección que se ha producido con mayor rapidez de la pronosticada por una mayoría de todógos y, en menor medida, por los conocedores de la prosopopeya e intríngulis con el que se mueven los asuntos políticos en el pequeño Estado Vaticano donde nunca manca fineza.

La Manca fineza ha faltado en el espectáculo informativo televisivo en el que las cadenas españolas han convertido el largo, larguísimo, proceso de las exequias fúnebres del Papa Francisco: primero la preparación del cadáver para su exposición pública en el funeral celebrado en la Plaza de San Pedro, al que asistieron Reyes, Jefes de Estado y Jefes de Gobierno, después el paseíllo del féretro por el centro de Roma, hasta la Basílica de Santa María Mayore, donde descansan ya sus restos. Luego vinieron las nueve misas, una diaria, en su memoria, y todo el trámite protocolario previo al inicio del Conclave, y el desarrollo del mismo.

Y todo retransmitido en directo desde el día del fallecimiento del Papa Francisco, con horas de emisión que era necesario rellenar sin más información que la repetida hasta la saciedad, que dio lugar a un sinfín de pleonasmos sinsentido y reiteración en los mismos contenidos; por ejemplo, sobre el protocolo que se sigue en cada evento y, esto es lo peor, con preguntas ilocutivas vacuas, por genéricas, que ponían en un compromiso a los periodistas que estaban a pie de micro en diferentes puntos del Vaticano, del tipo: ¿qué ambiente se respira en la plaza de San Pedro a esta hora?, ¿hay mucha gente?, ¿qué se comenta en la plaza?, ¿cómo matan el tiempo de espera? Preguntas que les ponían en un compromiso porque les obligaba a improvisar un discurso descriptivo de una situación que apenas variaba nada, repleto de respuestas simplonas y muletillas centradas en lo mismo, repetidas una y otra vez: el ambiente es de espera, de emoción contenida, hay personas venidas de muchas partes del mundo, etc.

Junto a la desinformación, por reiterativa, que provoca convertir la información en un espectáculo televisivo que obliga a estirar el chicle sin nada nuevo noticiable durante horas; está la falta de criterio por parte de los programadores que, abducidos por la pugna mediática por estar presentes allí donde se produce un hecho de alcance planetario, olvidan que su función informativa no es estar por estar en un punto noticiable, sino estar si tienes algo novedoso que contar que no sea siempre lo mismo: lo poco gusta y lo mucho cansa y agota la mente; por eso hubiera sido mejor realizar conexiones puntuales cada vez que hubiera una información nueva de interés.

Que olvidan que estar emitiendo durante horas todos lo mismo, supone reducir la posibilidad de los espectadores para elegir otros contenidos, en lugar de obligarles a ver, sí o sí, un espectáculo que termina por devaluar, para los devotos, la espiritualidad que debería ser la característica principal que empapa la muerte de un Papa y su sustitución por otro, al dar pábulo a un debate centrado en el carácter más o menos progresista del que se va y de su sucesor.

Programadores que olvidan, y aquí la mayor responsabilidad está en la televisión pública, el artículo 16 la Constitución donde se establece que el Estado español es aconfesional; esto es, que no privilegia unas creencias religiosas sobre otras. Que los canales públicos, en especial RTVE, se lancen a competir con las televisiones privadas, que no están obligadas a mantener un equilibrio en los contenidos a este respecto, supone una dejación de su función de velar por este principio constitucional, que ya olvidó en la pasada Semana Santa donde hubo más retransmisiones en directo que nunca de procesiones. En concreto L2 dedicó durante el jueves y viernes santo tres cuartas partes de su programación a la retransmisión en directo de las procesiones más significativas en diferentes ciudades de España.

El nuevo jefe de RTVE, José Pablo López, no debe tener claro todavía que la televisión pública es para todos los ciudadanos y no para una parte, y desconoce que la mayoría social ya no es creyente debido al proceso imparable de secularización de la sociedad española desde el comienzo de este siglo. Igual no ha debido leer el informe de 2019 del CIS en el que, por primera vez, se apuntaba que el número de ateos, agnósticos y no creyentes superó al de católicos practicantes, con un 29% de la población. Caída que se agudizó en el informe de 2021 en el que el porcentaje de creyentes cayó hasta el 16,7%. Datos corroborados por la propia Conferencia Episcopal Española, que en su informe de 2019 ya confirmaba el descenso en picado, desde 2007, de la práctica de sacramentos como los bautizos y comuniones, un 40% menos, y los matrimonios religiosos, 45.000 menos en la última década. Guarismos que confirman la caída sostenida de la influencia del catolicismo en la sociedad.

Alguien debería recordarle también que la televisión pública no debería ser el foro para la especulación no fundamentada en hechos y datos, como se ha especulado en las largas horas de retransmisión en directo, en las que los periodistas se han lanzado, sin criterio alguno, —error en el que han caído todos los medios— a ofrecer quinielas sobre las Cardenales más papables, para no ser menos que el resto de medios. Mimetismo absurdo que genera confusión que desinforma y desvía el mensaje informativo para centrarlo en un nominalismo de candidatos: ¿cómo están las apuestas? Mejor hubiera sido con tantas horas de emisión por delante que alguien, con criterio periodístico, hubiera preparado dossiers informativos para los presentadores y redactores, con datos curiosos u originales sobre el Estado Vaticano y su funcionamiento, siempre tan opaco, o sobre lo que doctrinalmente estaba en juego en esta elección.

Hemos oído hablar de continuidad o no en el mensaje doctrinal del Papa Francisco, pero han sido pocos los expertos que han explicado cuales son los puntos fuertes de ese mensaje. Como tampoco nos han aclarado cuales eran los argumentos de los opositores al papado de Francisco, y qué es lo que querían exactamente. Ni se ha profundizado en contar a la audiencia el impacto que ha tenido en la estructura de poder en el Vaticano, los cambios acometidos por el Papa Francisco. Contenido que hubiera permitido dotar de información interesante para la audiencia en las largas horas de retransmisión, sin tener que caer en las informaciones y expresiones simplonas y hueras resultado de optar por hacer un espectáculo televisivo.

Ahora todo está centrado en cuál será la dimensión doctrinal y pastoral del nuevo Pontífice—constructor de puentes—, León XIV, qué en sus primeros mensajes dirigidos a los fieles, parece seguir la estela aperturista de su antecesor, aunque con maneras menos entusiastas y más distantes que su predecesor, y con un gusto mayor por los rituales litúrgicos clásicos. Veremos.

Vicente Mateos Sainz de Medrano.
Periodista, profesor universitario
y Doctor en Teoría de la Comunicación de Masas

La revolución de la IA

El impacto que la Inteligencia Artificial (IA) tendrá sobre la actividad productiva hace prever una seria remodelación de la fuerza de trabajo cualificada. Esta nueva revolución tecnológica tendrá efectos adversos sobre el empleo, dada la pérdida masiva de puestos de trabajo que implica a medio plazo y que, muy probablemente, no será compensada por un incremento equivalente en el número de trabajadores cualificados.

Sin embargo, aun siendo muy seria esta amenaza para la clase trabajadora, la más grave es probablemente la que se deriva de la manipulación de las conciencias mediante las redes sociales y la adicción que ello conlleva, de especial gravedad por su evidente toxicidad psicológica sobre los menores.

A fin de ilustrar el impacto que tendrá, que está teniendo ya esta revolución tecnológica, puede ser de utilidad para su comprensión la realización de una prueba sencilla, planteando una tarea concreta a un chatbot; es decir, un sistema informático que basado en la IA permite mantener una conversación hombre-máquina, simulando las respuestas que daría una persona.

Por ejemplo:

“Escriba un texto de unas 1400 palabras que, desde una perspectiva marxista, analice los riesgos para las democracias de las redes sociales, las chatbots y la inteligencia artificial (IA); en particular, el riesgo de una evolución del capitalismo hacia formas de tecno-feudalismo y nuevos totalitarismos.”

El resultado ha sido la redacción totalmente automática del siguiente texto:

Introducción

En la actualidad, las redes sociales, los chatbots y la inteligencia artificial (IA) han transformado radicalmente la forma en que nos comunicamos, interactuamos y consumimos información. Sin embargo, desde una perspectiva marxista, es crucial examinar cómo estas tecnologías pueden amenazar las democracias y contribuir a una evolución del capitalismo hacia formas de tecno-feudalismo y nuevos totalitarismos. Este análisis se centrará en los riesgos inherentes a estas tecnologías, su relación con el poder económico y político, y las implicaciones para la lucha de clases.

1. Redes Sociales y la Manipulación de la Opinión Pública

Las redes sociales han emergido como plataformas dominantes para la comunicación y la difusión de información. Sin embargo, su estructura y funcionamiento están profundamente influenciados por intereses capitalistas. Las empresas que controlan estas plataformas, como Facebook, Twitter y Google, operan con el objetivo de maximizar sus beneficios, lo que a menudo se traduce en la manipulación de la información.

Desde una perspectiva marxista, esto puede verse como una forma de control ideológico. Las redes sociales no solo facilitan la comunicación, sino que también actúan como herramientas de propaganda. La información se filtra y se prioriza de acuerdo con algoritmos que favorecen el contenido que genera más interacción, lo que a menudo significa que las noticias sensacionalistas y polarizadoras reciben más atención. Esto puede llevar a la desinformación y a la creación de burbujas informativas, donde los usuarios solo se exponen a opiniones que refuerzan sus creencias preexistentes.

Además, la manipulación de la opinión pública a través de las redes sociales puede ser utilizada por actores políticos y económicos para desestabilizar democracias. La interferencia en elecciones, la difusión de noticias falsas y la polarización social son solo algunos ejemplos de cómo estas plataformas pueden ser utilizadas para socavar la voluntad popular. En este sentido, las redes sociales se convierten en un campo de batalla ideológico donde las luchas de clases se manifiestan de nuevas maneras.

2. Chatbots e IA: Automatización y Desigualdad

La llegada de chatbots e inteligencia artificial ha prometido aumentar la eficiencia y reducir costos en diversas industrias. Sin embargo, esta automatización también plantea serios riesgos para la fuerza laboral y, por ende, para la democracia. Desde una perspectiva marxista, la automatización puede ser vista como una extensión de la lógica capitalista que busca maximizar la producción mientras minimiza los costos laborales.

La sustitución de trabajadores por máquinas no solo genera desempleo, sino que también exacerba la desigualdad económica. A medida que las empresas se vuelven más dependientes de la IA, los trabajadores menos calificados se ven desplazados, mientras que aquellos con habilidades técnicas avanzadas se benefician. Esto crea una brecha creciente entre las clases sociales, donde una élite tecnológica acumula riqueza y poder, mientras que las clases trabajadoras enfrentan precariedad.

Además, la IA y los chatbots pueden ser utilizados para la vigilancia y el control social. Las tecnologías de reconocimiento facial y análisis de datos permiten a los gobiernos y corporaciones monitorear a la población de maneras sin precedentes. Esto plantea un riesgo significativo para las libertades civiles y la privacidad, elementos fundamentales de cualquier democracia. La posibilidad de un estado de vigilancia, donde la disidencia es reprimida y la oposición es silenciada, se convierte en una realidad tangible.

3. Tecno-feudalismo: Una Nueva Forma de Dominación

El concepto de tecno-feudalismo se refiere a una posible evolución del capitalismo hacia un sistema donde el control de la tecnología y la información se convierte en la base del poder. En este nuevo orden, las grandes corporaciones tecnológicas actúan como señores feudales, controlando no solo los medios de producción, sino también el acceso a la información y a los recursos digitales. Este fenómeno plantea serias implicaciones para la democracia y la lucha de clases, ya que la concentración de poder en manos de unas pocas empresas puede llevar a una forma de dominación que recuerda a las estructuras feudales del pasado.

En un sistema tecno-feudal, la mayoría de la población se convierte en «siervos» digitales, dependientes de las plataformas y servicios que estas corporaciones ofrecen. La falta de acceso a la tecnología y a la educación digital puede perpetuar la desigualdad, creando una clase de «excluidos» que no pueden participar plenamente en la economía digital. Esto no solo limita las oportunidades económicas, sino que también restringe la capacidad de los individuos para ejercer su voz en la esfera pública, debilitando así la democracia.

Además, el tecno-feudalismo puede dar lugar a una nueva forma de control social. Las corporaciones tecnológicas, al tener acceso a grandes volúmenes de datos sobre los usuarios, pueden influir en sus comportamientos y decisiones de maneras que son difíciles de detectar. La personalización extrema de la publicidad y la manipulación de la información pueden llevar a una ciudadanía pasiva, donde las personas son más susceptibles a la propaganda y menos propensas a cuestionar el statu quo. Este fenómeno puede ser visto como una forma de alienación, donde los individuos se sienten desconectados de su propia representación y de la capacidad de influir en su entorno político y social.

4. Nuevos Totalitarismos: La Amenaza de la IA y el Control Social

La combinación de redes sociales, chatbots e inteligencia artificial también plantea el riesgo de nuevos totalitarismos. A medida que los gobiernos y las corporaciones se vuelven más adeptos en el uso de estas tecnologías, la posibilidad de un control autoritario sobre la vida cotidiana se vuelve más real. La IA puede ser utilizada para la vigilancia masiva, la represión de la disidencia y la manipulación de la opinión pública, creando un entorno donde la libertad de expresión y los derechos humanos son sistemáticamente violados.

Desde una perspectiva marxista, este desarrollo puede ser visto como una forma de control de clase. Los regímenes autoritarios pueden utilizar la tecnología para mantener su poder y suprimir cualquier forma de resistencia. La historia ha demostrado que los regímenes totalitarios a menudo recurren a la propaganda y a la censura para controlar la narrativa y silenciar a sus oponentes. En la era digital, estas tácticas se vuelven más sofisticadas y efectivas, lo que plantea un desafío significativo para la democracia y la justicia social.

Además, el uso de la IA en la toma de decisiones políticas puede llevar a una deshumanización del proceso democrático. Las decisiones que afectan a la vida de las personas pueden ser tomadas por algoritmos que carecen de empatía y comprensión de las complejidades humanas. Esto puede resultar en políticas que favorecen a las élites económicas y marginan a las comunidades más vulnerables, perpetuando así las desigualdades existentes.

5. Resistencia y Alternativas: Hacia una Democracia Digital

A pesar de los riesgos asociados con las redes sociales, la IA y el tecno-feudalismo, también existen oportunidades para la resistencia y la construcción de alternativas. Desde una perspectiva marxista, es fundamental que los movimientos sociales y las organizaciones de base se apropien de estas tecnologías para empoderar a las comunidades y promover la justicia social.

La resistencia y las alternativas hacia una democracia digital son temas muy interesantes y relevantes en la actualidad. La idea de una democracia digital implica utilizar la tecnología para fomentar la participación ciudadana, la transparencia y la rendición de cuentas. Sin embargo, también enfrenta desafíos, como la desinformación, la privacidad de los datos y la desigualdad en el acceso a la tecnología.

Las alternativas pueden incluir plataformas de votación en línea, foros digitales para el debate público y herramientas que permitan a los ciudadanos expresar sus opiniones de manera más efectiva. Es fundamental que estas iniciativas se desarrollen de manera inclusiva y ética, asegurando que todos tengan voz y acceso.

La resistencia hacia una democracia digital a menudo surge de preocupaciones legítimas sobre la seguridad, la privacidad y el control de la información. Muchos ciudadanos temen que la digitalización de los procesos democráticos pueda llevar a la manipulación de datos o a la vigilancia masiva.

Sin embargo, estas preocupaciones también han impulsado la búsqueda de alternativas más seguras y transparentes. Iniciativas como el uso de blockchain para garantizar la integridad de las votaciones, así como el desarrollo de plataformas de participación ciudadana que priorizan la privacidad, son ejemplos de cómo se pueden abordar estos desafíos.

Además, es crucial fomentar la educación digital para empoderar a los ciudadanos, permitiéndoles navegar de manera crítica en un entorno digital cada vez más complejo. En este camino hacia una democracia digital, la colaboración entre gobiernos, organizaciones civiles y el sector tecnológico será fundamental para construir un sistema que no solo sea accesible, sino también justo y representativo para todos.

Conclusión

El chatbot ha redactado el texto solicitado de 1400 palabras a partir de unas concisas indicaciones de 45 palabras. Esta tarea la ha realizado en un tiempo récord de 3 segundos, imposible de emular por un ser humano.

El impacto que tendrá la IA sobre las fuerzas productivas es evidente; probablemente muy superior al que tuvo la máquina de vapor en la segunda mitad del siglo XVIII, que impulsó la revolución industrial a lo largo del siglo XIX y parte del XX. La máquina de vapor sustituyó la fuerza de trabajo física por la fuerza de la máquina, multiplicando enormemente la productividad.

La capacidad de los algoritmos de aprendizaje automático, tratamiento de gigantescas cantidades de datos y enorme potencial de mantener conversaciones coherentes a través de las redes, indiscernibles de las de un ser humano, supondrá un cambio radical en la explotación de la fuerza de trabajo y en la estructura de los medios de producción.

La automatización de la fuerza de trabajo intelectual -que sustituirá en parte a la fuerza de trabajo humana- implica un crecimiento exponencial de la productividad, pero también una amenaza, junto a las redes sociales, por su posible utilización para el control totalitario de las poblaciones.

En efecto, los algoritmos de la IA pueden perpetuar o amplificar sesgos existentes en los datos utilizados para su entrenamiento y aprendizaje automático, representando una amenaza, junto las redes sociales, por su capacidad de manipular el sentido común de las poblaciones, en función de los intereses de una casta de ultrarricos propietarios de tales medios, ajenos al interés público; es lo que se ha dado en llamar tecno-feudalismo.

Por último, termino haciendo hincapié en la necesidad de que nuestro país no pierda una vez más la carrera de los grandes avances científicos y tecnológicos, que inexorablemente impulsará la IA. Para ello es esencial poner en valor el talento de nuestros jóvenes, dándoles las oportunidades que posibiliten el desarrollo de sus capacidades.

Por tanto, es de vital importancia que no se pierda el enorme talento potencial de la juventud, con especial atención a las capas sociales más desfavorecidas. El principal obstáculo sigue siendo la pervivencia de una estructura social profundamente injusta. Remover tal obstáculo es interés objetivo del conjunto de la sociedad.

Manuel Ruiz Robles, capitán de navío (r) del cuerpo de ingenieros de la Armada, Ingénieur Supélec por la Universidad de París (1970).

Pugna catódica

En mis muchos años de ejercicio del periodismo no almaceno en la memoria que un programa de televisión haya recurrido a una campaña publicitaria radiofónica en diferentes medios, para reseñar que sigue siendo líder en su franja horaria. Al escuchar la cuña que daba cuenta a los oyentes de que <<El Hormiguero>> sigue teniendo más audiencia que su competidor, <<La Revuelta>>, recordé la frase del latín medieval de excusatio non petita, accusatio manifiesta (excusa no pedida, acusación manifiesta), que implícitamente desvelaba que Pablo Motos y Atresmedia están muy nerviosos, por la competencia tan potente con la que les ha plantado cara TVE1 con David Broncano y el programa <<La Revuelta>>. Propuesta que los ejecutivos de la tele abierta pensaron que sería un fracaso, confiados en que no iba a encajar con el espectador tipo de la 1. Creencia que se frustró con los primeros datos de audiencia que confirmaban que <<La Revuelta>> había superado el liderazgo de <<El Hormiguero>>, desatando el tembleque de Motos y los ejecutivos de su tele.

Cuando se tiene que recordar a los espectadores —también es válido en las relaciones jerárquicas y sociales— que sigues siendo el líder, implícitamente trasluces que ya no lo eres y, esto es lo peor, que te tomas la competencia que no esperabas como una batalla donde todo vale que termina por desnortarte. Por ejemplo, cuando das pábulo a tu cabreo al caer en la bajeza de impedir que tu competidor entreviste a un determinado personaje de éxito, acogiéndote al contrato que tu medio tiene suscrito con la promotora Dorna, poseedora de los derechos de explotación comercial del Mundial de Motociclismo que organiza. Acuerdo para la retransmisión de los Grandes Premios que se celebran en España, en el que una clausula establece que ciertos pilotos están obligados a dar entrevistas exclusivas a Atresmedia, antes que a otra televisión. Decisión lícita, sin duda, cuyo reverso es caer en el barro para laminar a tu contrincante, al que solo le haces cosquillas a costa de mostrar tu inseguridad: tu debilidad.

Pero la pugna que ha buscado Motos bloqueando una entrevista de su contrincante significa que se siente amenazado por Broncano, y que su disputa catódica no es un simple juego de egos, sino que tiene más recorrido detrás con un poso político, de concepto de programa televisivo, y de prestigio para TVE y Atresmedia. Cuando uno se siente imbatible se adocena en la creencia de que nadie le puede arrebatar su posición de privilegio que conduce, inexorablemente, a una autoestima ególatra que no admite rival, olvidando que todo evoluciona y más en la televisión donde el fluir de formatos, contenidos y presentadores son la esencia del medio.

A Pablo Motos le está pasando lo que le sucedió a Boabdil cuando al entregar las llaves de su Reino de Granada a las huestes de los Reyes Católicos, se preguntaba cómo era posible que unos palurdos como los brutos e incultos cristianos, que apenas se lavaban, hubieran acabado con el poder, refinamiento y sabiduría de su reino. No cayó en la cuenta de que sus oponentes contaban con la bombarda —origen del cañón— que terminó por derribar las murallas que le protegían a él y a su reino.

Broncano ha llegado a la 1 con la bombarda televisiva de <<La Revuelta>>, un formato que no juega con las reglas seculares del medio que gusta a los espectadores por su carácter formalmente disruptivo, que juega con el desconcierto de que nunca se sabe quién será el invitado del día y con la informalidad que supone que el director-presentador del espacio, él mismo, nunca sepa que le aguarda cuando sale a escena. Justo lo apuesto a <<El Hormiguero>>, donde todo está medido al milímetro y sujeto a un guion que Motos sigue a rajatabla, porque no sabe improvisar. Formato donde el espectador sabe de antemano quiénes o quién va a ser el entrevistado principal y la secuencialidad del programa, frente al poco guion con el que aparentemente se desarrolla <<La Revuelta>>, donde el espectador nunca sabe qué va a pasar a continuación.

Improvisación que gusta más, que atrae más que el formalismo a un público joven acostumbrado en su vida cotidiana, por el uso de las redes sociales, a esperar siempre lo impensable, lo que no está predeterminado ni configurado de antemano; aunque luego todo sea un trampantojo porque siempre existe, y más en la tele, un mínimo orden que Broncano, tiene la habilidad de opacar a ojos del espectador. Cumple así con el objetivo que buscaba la anterior dirección de TVE de atraer a esa franja horaria al público joven perdido con la apuesta por un presentador y un formato de éxito, <<La Resistencia>>, testado en la plataforma de Movistar Plus, donde expiraba su contrato en junio de este año. No fue sencilla la negociación de su presencia en la 1 por las exigencias de Broncano que, al final, se conformó con un contrato por dos años, él quería tres, con una subida de 27.500 euros, hasta los 87.500 por programa, respecto de los 60.000 que ganaba por programa de <<La Resistencia>>.

Pablo Motos se ha encontrado con un competidor que no esperaba, confiado en que su Reino de Taifas iba a ser eterno, sin darse cuenta de que, con o sin Broncano, <<El Hormiguero>> ha entrado hace tiempo en un estancamiento propiciado por él mismo al manchar el puro entretenimiento del inicio, introduciendo la intencionalidad política, de sesgo derechista, a través de las preguntas a sus entrevistados, muchos de los cuales le han cantado la gallina en directo por el contenido de las mismas que les empujaba a tener que pronunciarse políticamente sobre asuntos de la actualidad, formuladas con un claro interés espurio. Tendencia que el propio Motos viene confirmando desde hace muchos meses en sus comentarios, burdos y tendenciosos, cuando no faltones, que le cierran el paso a ampliar su espectro de audiencia.

Error en el que no incurre Broncano porque no le hace falta verbalizar, como hace Motos, ningún discurso político porque el formato con el que la <<La Revuelta>> se presenta a la audiencia es, en sí mismo, transmisor de la idea de cambio y progreso sin necesidad de mensajes declarativos. Esta es la razón por la que la rivalidad entre ambos programas y presentadores, ha trascendido más allá de la mera pugna catódica por las audiencias, por el planteamiento de polarización con el que plantea Motos esa rivalidad al evitar que su oponente entreviste a un personaje público, lo que convierte en una batalla lo que solo debería ser una apuesta por ver quien tiene más meninges y capacidad para atraer más espectadores.

Pugna en la que se juega el prestigio de ambos grupos televisivos: la televisión pública, TVE1, y la televisión privada liderada por Atresmedia. De momento son los primeros los que han dado el zapatazo a los que se sentían aposentados e inamovibles, mientras Broncano empieza a sacarle, día a día, varios cuerpos de ventaja a Motos. Las espadas siguen en alto y veremos a quién le tiemblan antes las piernas al ver la marcha de las audiencias. Y quien templa mejor los nervios, la tensión, de verse en el ojo del huracán de la mirada pública.

Vicente Mateos Sainz de Medrano.
Periodista, profesor universitario
Doctor en Teoría de la Comunicación de Masas

¡Que las luces no te confundan!

Estamos asistiendo durante estos días a la escenificación del teatro navideño. Un mundo de luces destellantes, comilonas, buenos deseos sin pasarse, compras disparatadas y, en el fondo, cada vez más difuminada, una de las fiestas mayores del cristianismo en todas sus manifestaciones.

Indudablemente, después de todo un año todas las personas tienen ganas de fiesta, de encontrarse con la familia, a veces lejana, como nos recordaban los anuncios de turrones. No obstante, en este contexto festivo, es importante saber el trasfondo de lo que estamos celebrando. Para ello vayamos por partes.

En primer lugar, y desde una perspectiva histórica española, que no tiene por qué ser la de otros países, los cuales pueden representar varios miles de millones de habitantes del planeta, la Navidad es una fiesta religiosa cristiana. El nacimiento de Jesucristo marca la transición entre el antiguo y nuevo testamento de esa novela llamada Biblia, cuya verosimilitud está al mismo nivel que cualquier otra obra de fantasía, como, por ejemplo, El Señor de los Anillos. Lo que sucede es que esa ficción fue asimilada como referencia en el siglo IV de nuestra era, la cristiana, por supuesto, por el emperador Constantino como un elemento necesario para estabilizarse en el poder. No voy a entrar en detalles al respecto, porque si alguien quiere informarse sobre ello puede recurrir al libro de Fernando Conde Torrens, “Año 303, inventan el cristianismo”, que con algunos aspectos cuestionables arroja bastante luz sobre este problema.

Lo que hizo Constantino no es algo novedoso, es algo que han hecho las sociedades humanas a lo largo de la historia. Como viene a decir Yuval Noah Harari en Sapiens, cuando explica como la religión fue un mecanismo fundamental de cohesión política entre personas que tienen intereses muy diversos. En todas las sociedades primitivas siempre ha habido una religión que aglutinaba a los habitantes, que servía para explicar místicamente hechos que la ciencia del momento no sabía interpretar y para mantener una arquitectura política de poder donde había señores y súbditos. De ahí que cada grupo de civilización tengan un conjunto de creencias propio tan verosímil como el de las demás: Todas las religiones dicen que las demás son falsas y no mienten.

Evidentemente, la religión se va construyendo con el paso del tiempo y lo que en un momento parece certero después no tiene por qué serlo y viceversa. Por ejemplo, la virginidad de María se instituyó como dogma en el Concilio de Letrán, a mediados del siglo VII. ¿Virginidad retroactiva con 649 años de retraso? Hasta Santo Tomás de Aquino reconoció que la razón no podía probarlo; es decir, traduciéndolo, que era un cuento.

Pero quizá desde el punto de vista político el momento religioso culminante de la Navidad es la adoración de los Reyes Magos. Es irrelevante su procedencia y lo que trajeran, son solo detalles para adornar el cuento, lo fundamental es que, siendo reyes, se postran ante un ser superior, cuyo representante en la Tierra, nos referimos a occidente y sus colonias, es el Papa de Roma. Es emular la estructura de un imperio donde el máximo poder está en manos de un representante de Dios escogido por sus pares. Así ha venido funcionando la Iglesia desde entonces. Los reyes súbditos de ese ente ficción representado por el Papa han impuesto la religión salvajemente a sangre y fuego en todos los lugares que han conquistado, como método de implementar una política económica extractiva soportada por la esclavitud.

La irrupción del capitalismo de masas ha dado una vuelta a este esquema y lo que vemos ahora es una actualización de dioses. Hemos pasado del dios bíblico al dios económico: el dinero y la acumulación de capitales. Ahora ya la fiesta religiosa es un tema de nostálgicos que cada vez le importa menos a nadie. Ahora lo importante es gastar: comprar sin medida cosas innecesarias, comer y beber lo que no está escrito, viajar a sitios exóticos para seguir comprando, etc. La maquinaria del capitalismo extractivo vive de eso y está asentada sobre un absurdo tan inconsistente como la propia religión. La religión se sustenta sobre una verdad revelada imposible de analizar científicamente, porque incluso tampoco sabemos quién la ha revelado; al menos en una novela solemos saber la autoría. El capitalismo se monta directamente sobre un supuesto falso de crecimiento infinito; cuando sabemos por la Física que el crecimiento infinito en un mundo finito es absolutamente imposible.

Toda esta ficción de dioses, luces y compras genera una felicidad ficticia que pretende tapar un mundo brutalmente desigual, donde coexiste la riqueza extrema con la pobreza extrema, y donde para generar esa acumulación de riqueza es imprescindible la extracción de recursos sobre grandes capas de la sociedad que caen en la pobreza. No hace falta irse al tercer mundo, lo tenemos aquí, aunque los propios que la sufren no sean capaces de interpretar el porqué, para eso se inventó la religión. La anulación del raciocinio vía verdades reveladas e incultura lleva a generar una población de súbditos que aceptan su condición como normal. En España sabemos mucho de eso, no en vano la Inquisición estuvo en vigor hasta 1834, y volvió de facto durante la dictadura entre 1939 y 1975, y la esclavitud estuvo en vigor hasta 1886.

La confluencia de las dos visiones del proceso navideño crea una ficción que ilustra muy bien la teoría de la bicicleta, seguir pedaleando más y más para no caer. Pero el problema es que al final de este camino hay un precipicio que se llama cambio climático y ahí se va a estrellar la bicicleta con todos sus dioses, su dinero y toda la especie humana si no hacemos algo para parar esta locura. Estos gestores del dinero y la fe son la prueba fehaciente de que no hay un más allá, porque si lo hubiera, con un dios misericordioso, no harían lo que hacen: vivir extrayendo toda la riqueza y eliminando a quien se les pone por delante como si no hubiera un mañana para ellos.

Avisos los ha habido desde hace mucho, hasta Alexander von Humboldt, hace más de 200 años, se dio cuenta del impacto que suponía para el medio natural los cultivos intensivos en el Virreinato de Nueva Granada. Rachel Carson inició su lucha particular contra el DDT a finales de los 60. Los científicos de IPCC ponen blanco sobre negro el problema un día y otro. Debemos ser conscientes de que, a la Naturaleza, al planeta, le da lo mismo, ha estado sin nosotros toda su historia, ya que llevamos provocando daños severos desde hace unos 300 años, pero la Tierra está aquí desde hace 4.500 millones de años, y podrá seguir sin nosotros de la misma manera.

La fiesta, aunque sea la de Navidad, no puede continuar de esta manera o estaremos perdidos por nuestra propia inconsciencia y esto no es un juego de la Play. Cuando salta en game over ya no hay vuelta atrás, es imposible reiniciar, incluso aunque saquen el Cristo en procesión a dar una vuelta.

Eduardo Sabina Blasco
Militante de Izquierda Socialista
-PSOE-Madrid

Canciones con poder: Las nanas de la cebolla

Este poema fue escrito por Miguel Hernández en septiembre de 1939, estando preso en la cárcel de Torrijos; un edificio que está situado en el distrito de Salamanca, en Madrid, flanqueado por las calles: Conde Peñalver, Juan Bravo, General Díaz Polier y Padilla. Su nombre “cárcel de Torrijos”, obedecía a la c/ Torrijos en la que se sitúa el edificio, hoy calle Conde de Peñalver. Uno de esos edificios de la vergüenza que el Ayuntamiento de Madrid debiera recordar con una placa que contribuya a combatir la desmemoria.

En palabras de la escritora chilena Concha Zardoya, Las nanas de la cebolla es “una de las más trágicas canciones de cuna de toda la poesía española”. La inspiración le llegó a Miguel Hernández por la pena y la impotencia de saber que su mujer llevaba tiempo comiendo solo pan y cebolla, a pesar de estar en aquellos momentos amamantando a su hijo último hijo, Manuel Miguel. La situación se la transmitió en sus cartas a la cárcel, Josefina Manresa, su mujer. En la respuesta que Miguel Hernández envió a su esposa incluyó Las nanas de la cebolla, y escribió:

«Estos días me los he pasado cavilando sobre tu situación, cada día más difícil. El olor de la cebolla que comes me llega hasta aquí, y mi niño se sentirá indignado de mamar y sacar zumo de cebolla en vez de leche. Para que lo consueles, te mando esas coplillas que le he hecho, ya que aquí no hay para mí otro quehacer que escribiros a vosotros o desesperarme…»

Traigo este poema a Canciones con Poder para contribuir a difundir que hoy, cuando estamos finalizando el año 24 del s. XXI, el hambre mata cada día a más de 24.000 personas en todo el mundo, muchas de ellas como consecuencia de los conflictos armados. Son la parte más extrema de los 282 millones de personas que pasan hambre en el mundo.

Que nadie piense que esto no va con nosotros. Puede que nadie muera de hambre en España, pero hay 6.235.971 de personas que en España sufren inseguridad alimentaria, según el estudio de Ana Moragues Faus y Claudia Magaña González, realizado en 2022 para la Universidad de Barcelona.

La situación de mayor brutalidad se está produciendo en Gaza (Palestina), donde la ONU estimaba en el mes de junio pasado que el 96% de la población pasa días enteros sin comer o no come adecuadamente todos los días.

Ante tanta brutalidad, evitemos que nuestras hijas e hijos pequeños “…sepan lo que pasa ni lo que ocurre”, pero nosotros y nosotras no nos derrumbemos. Digamos que no en nuestro nombre, al hambre, a las guerras y a los genocidios. Exijamos a nuestro Gobierno la ruptura de relaciones económicas y diplomáticas con los estados, como el israelí, que pisotea los derechos humanos y extermina a la población gazatí.

Miguel Hernández moría en el penal de Alicante el 28 de marzo de 1942, sin haber llegado a la edad de 32 años. Su poesía comprometida con los desfavorecidos, hoy no guardaría silencio.

Roberto Tornamira
Miembro del Comité de Redacción
de Tribuna Socialista

Las nanas de la cebolla

La cebolla es escarcha La carne aleteante,

cerrada y pobre: súbito el párpado,

escarcha de tus días el vivir como nunca

y de mis noches. coloreado.

Hambre y cebolla: ¡Cuánto jilguero

hielo negro y escarcha se remonta, aletea,

grande y redonda. desde tu cuerpo!

En la cuna del hambre Desperté de ser niño:

mi niño estaba. nunca despiertes.

Con sangre de cebolla Triste llevo la boca:

se amamantaba. ríete siempre.

Pero tu sangre, Siempre en la cuna,

escarchada de azúcar, defendiendo la risa

cebolla y hambre. pluma por pluma.

Una mujer morena, Ser de vuelo tan alto,

resuelta en luna, tan extendido,

se derrama hilo a hilo que tu carne es el cielo

sobre la cuna. recién nacido.

Ríete, niño, ¡Si yo pudiera

que te tragas la luna remontarme al origen

cuando es preciso. de tu carrera!

Alondra de mi casa, Al octavo mes ríes

ríete mucho. con cinco azahares.

Es tu risa en los ojos Con cinco diminutas

la luz del mundo. ferocidades.

Ríete tanto Con cinco dientes

que en el alma al oírte, como cinco jazmines

bata el espacio. adolescentes.

Tu risa me hace libre, Frontera de los besos

me pone alas. serán mañana,

Soledades me quita, cuando en la dentadura

cárcel me arranca. sientas un arma.

Boca que vuela, Sientas un fuego

corazón que en tus labios correr dientes abajo

relampaguea. buscando el centro.

Es tu risa la espada Vuela niño en la doble

más victoriosa, luna del pecho:

vencedor de las flores él, triste de cebolla,

y las alondras. tú, satisfecho.

Rival del sol. No te derrumbes.

Porvenir de mis huesos No sepas lo que pasa

y de mi amor. ni lo que ocurre.

Miguel Hernández Gilabert


Enlace a la interpretación de José Mercé, con la colaboración de Pasión Vega y Carlos Sanlúcar. Canción incluida en su álbum “Ruido”, en el que incluye Las nanas de la cebolla:

Canciones con poder: “Al vent” de Raimon

Esta canción del valenciano Raimon fue compuesta en 1959, aunque no vería la luz hasta 1963. Expresa el sentir de aquella generación que quería vivir “al viento”, como sinónimo de “libertad”; una ausencia de libertad que embutía a la sociedad de la época, “Tots plens de nits”.

La sociedad valenciana sufre hoy días en los que vuelve a buscar la luz y la paz, aunque por motivos bien distintos. La DANA les ha sumido en el llanto por los muertos y los desaparecidos. Salir adelante es un gran llanto, “La vida puede ser ese llanto”, decía Raimon en su canción.

Han pasado 61 años desde que “Al vent” viera la luz, y que pasase el tamiz de la censura. Hoy, Carla Sancho y Moisés Moon han hecho un bonito cover de la canción de Raimon, dedicado a las víctimas de la DANA y a todas y todos los voluntarios que están poniendo su esfuerzo en que la vida vuelva a la normalidad, cuanto antes.

Los pueblos no olvidamos; no olvidamos los crímenes del franquismo, y no olvidaremos la incompetencia del Gobierno valenciano en la gestión de las alertas o su responsabilidad por la disolución de la Unidad Valencia de Emergencias (UVE). Los crímenes contra el pueblo toman muchas formas, pero no nos confunden, aunque nos mientan.

Es de agradecer que tanto voluntario done horas de su vida para arreglar el desastre. Se ha escuchado mucho en estos días aquello de que el pueblo salva al pueblo, pero no hay que olvidar que como en todas las crisis, también hay otros que sacan provecho. Tal es el caso del negocio del automóvil, que está encareciendo el precio de los coches de segunda mano debido a la gran demanda. A saber qué pasará con todo aquello que se va a necesitar en la reconstrucción. Quizá se aprovechen, como casi siempre, sin pensar que la vida es cíclica.

Y sobre todo sería bueno que el gobierno autonómico hubiese explicado hace tiempo ya los errores cometidos aquel 29 de octubre, sin necesitar tantos días para justificar lo ocurrido, para buscar coartadas y excusas que quedarán muy bonitas en una comparecencia un mes más tarde del desastre.

No ens confondran, encara que ens menteixin.

Yolanda Garay Martínez
Roberto Tornamira
Miembros del grupo “Narradictos y Narradictos”

Al vent”
Al vent
La cara al vent
El cor al vent
Les mans al vent
Els ulls al vent
Al vent del món
I tots
Tots plens de nit
Buscant la llum
Buscant la pau
Buscant a déu
Al vent del món
La vida ens dóna penes
Ja el nàixer és un gran plor
La vida pot ser eixe plor
Però nosaltres
La cara al vent

Al viento”
Al viento
La cara al viento
El corazón al viento
Las manos al viento
Los ojos al viento
Al viento del mundo
Y todos
Todos llenos de noche
Buscando la luz
Buscando la paz
Buscando a dios
Al viento del mundo
La vida nos da penas
Ya el nacer es un gran llanto
La vida puede ser ese llanto
Pero nosotros
La cara al viento

Video:

«Al Vent»

Canciones con Poder: Nana urgente para Palestina

Marwan Abu-Tahoun Recio, cantautor y poeta, no adopta un nombre artístico ficticio. Marwan es el nombre con el que ha triunfado en la música de nuestro país al haberse convertido en uno de los mejores cantautores de la actualidad. Publicó su primer disco en 2001.

Si nos preguntamos cuál es el motivo de su éxito, quizás se debe a que sus canciones aúnan una métrica perfecta con una melodía insuperable. Además, Marwan sabe conectar con el público porque la gente se identifica con lo que él cuenta en sus canciones. Como expresa él mismo: “la Música le ha permitido ser poeta en sus canciones“ y ha acercado la Poesía a las nuevas generaciones, lo cual es todo un reto.

Nacido en el barrio madrileño de Aluche, un barrio obrero de la capital, es hijo de palestino y española. Suele mencionar que su padre nació en Cisjordania, en el campo de refugiados de Tulkarem, desde donde emigró a España, “cuando se creó el Estado de Israel, a mi familia le quitaron todo”, declaró Marwan en una entrevista radiofónica en octubre de 2023.

La historia personal de Marwan, le ha convertido en un artista comprometido, hasta tal punto que el Parlamento Europeo, le ha nombrado Músico por la Paz. Porque no olvidemos que Marwan no se ve a sí mismo únicamente como un músico, sino que también se considera un comunicador y confía en el poder transformador de sus canciones.

En enero del presente año presentó Nana urgente para Palestina: “Quería hablar sobre lo que están sufriendo, pero también sobre su fuerza y resistencia”, dijo.

En efecto, Palestina está sufriendo en estos momentos; los ataques israelíes han causado más de 42.000 muertos, a los que habrá que añadir los miles y miles de desaparecidos bajo los escombros. Palestina lleva 76 años de sufrimiento. Nadie se puede alegrar de las 1.200 muertes que tuvieron lugar el 7 de octubre de 2023, pero resulta imposible no comprender el derecho de un pueblo a luchar por lo que es suyo, por lo que le fue usurpado; sus casas y su tierra. Más de siete décadas de muerte, cárcel y persecución. No se puede olvidar que, según datos de la Agencia de Naciones Unidas para personas refugiadas de Palestina (UNRWA), 5,9 millones de palestinos y palestinas viven forzosamente fuera de su tierra. Fue certero Antonio Guterres, Secretario General de Naciones Unidas, cuando dijo que “los ataques de Hamas no vienen de la nada”.

Marwan ha alegado en más de una ocasión, que España para ser mejor país tiene que dejar de vender armas a Israel y participó en un acto solidario, organizado por Amnistía Internacional el pasado día 27 de septiembre en Madrid. Varios coristas de distintas agrupaciones musicales, unieron sus voces por la Paz, tan necesaria en estos momentos.

Palestina siguen en pie y es un ejemplo de resistencia para el mundo.

Idoya Hernández Olave
Roberto Tornamira
Miembros del grupo “Narradictos y Narradictos”

Nana Urgente para Palestina

Canción de Marwan Abu-Tahoun Recio

Soporté
Las cosas que nadie soporta
La pena del que a nadie importa
Y todavía sigo en pie

Soporté
El vientre de la artillería
El fuego en la guardería
Y todavía sigo en pie

No puedo hacer una canción de paz
Si no puedo ni mover
No puedo hacer una canción de paz
Si no puedo ni mover

Soporté
El miedo atroz entre las mantas
Que todos me dieran la espalda
Y todavía sigo en pie

Recuerda bien
Que no hay rumor que me defina
Todos me llaman Palestina
Y todavía sigo en pie


Actuación de Marwan en la Plaza de Lavapiés (Madrid), interpretando “Nana urgente para Palestina”.